BARCELONA
Braithwaite, en tierra de nadie
El delantero danés lleva días inmerso en una situación inusual: viajó a Lisboa sin estar inscrito en la Champions y desde este miércoles se ejercita con los nuevos fichajes en la Ciutat Esportiva.
Martin Braithwaite seguramente se estará preguntando por qué abandonó la zona de confort que le proporcionaba el Leganés por la auténtica montaña rusa en la que lleva días transitando en el Barcelona. El delantero danés, que fue fichado con el mercado cerrado y sustituyendo a un lesionado de larga duración, Ousmane Dembélé, dejando sin posibilidad de maniobra al equipo madrileño, apenas ha tenido minutos en LaLiga y ya no digamos en la Champions, donde ni tan siquiera fue inscrito al estar fuera de plazo.
Aun así, el delantero formó parte de la expedición blaugrana que viajó a Lisboa: había una puerta abierta a que pudiera jugar, en el caso excepcional que de se acumularan en la plantilla un número importante de positivos que impidiera contar con 13 futbolistas del primer equipo disponibles. Finalmente no hubo ningún positivo y el delantero tuvo que soportar la humillación de Lisboa en las gradas.
Sin embargo, Braithwaite no se ha marchado aún de vacaciones. El delantero se tomó cuatro días de fiesta y este miércoles se incorporó al trabajo en la Ciutat Esportiva. Lo hizo en el segundo grupo, junto a los fichajes Trincao, Pedri y Matheus Fernandes, y bajo la dirección del preparador físico, Edu Pons.
Una hora antes se habían ejercitado también los cedidos Rafinha, Wagué, Mirando y Oriol Busquets. Hay que recordar que tanto Todibo como Aleñá siguen confinados tras dar positivo el primero y el segundo por haber tenido contacto directo con el central francés durante los días previos al positivo.
Lo que nadie puede dudar es la profesionalidad con la que asume su trabajo Braithwaite. Acudió a entrenarse cada día tras el final de LaLiga, pese a no estar inscrito en la Champions -mientras Arthur se declaraba en rebeldía y ni tan siquiera pasaba el control de PCR- y ahora ha regresado a los entrenamientos tras disfrutar de poco más de cuatro días de descanso, mientras que el resto de compañeros están ya de vacaciones. Ahora habrá que ver si tanta profesionalidad le sirve para convencer a Ronald Koeman o el danés tendrá que hacer las maletas también dentro de esta renovación profunda.