"Estamos inmersos en un fútbol absolutamente adulterado y que huele a podrido"

Víctor Fernández ha ofrecido esta mañana una rueda de prensa en la que ha dado su visión sobre todo lo que ha sucedido desde que se aplazara el Deportivo-Fuenlabrada, una decisión que ha llevado a aplazar el inicio del playoff de ascenso y que impide al Real Zaragoza contar con Luis Suárez en dicha promoción. El entrenador aragonés se ha anticipado a las preguntas de los medios de comunicación y ha comenzado la comparecencia con su relato:

“Estamos ya en una fecha, en el mes de agosto, en la que todavía no se ha celebrado el playoff y todo viene como consecuencia de que nos ha asaltado la improvisación y, sobre todo, la falta de una solución clara a esa última jornada en la que todos los equipos jugaron sus partidos a excepción del Deportivo y el Fuenlabrada.

A mí me gustaría retrotraerme un poco porque si no la gente puede juzgar que tengo una visión muy partidista de lo que ha sucedido hasta ahora respecto a la Liga de Fútbol Profesional y lo que le está ocurriendo al Real Zaragoza. Primero voy a ponderar, aunque pueda parecer sorprendente, lo que LaLiga con su presidente Tebas ha hecho hasta ahora. Yo creo que ha sido un hombre que ha ordenado el fútbol, que ha sido un buen embajador del fútbol español hacia el exterior, que le ha dado un vigor y una salud económica que no tenía y que todo lo ha hecho desde un punto de vista de la imposición. Siempre le ha dado prioridad a lo que es el negocio y yo creo que ha sido un poco más secundario lo que realmente es el juego y el fútbol en sí, lo que representa y la afición. Esto ha provocado muchos de los problemas que estamos sufriendo en los últimos meses.

A partir de ahí, se han ido tomando una serie de medidas en LaLiga para fortalecer el apartado económico y, esto es una declaración que hice hace meses, lo que ha hecho es que el fútbol español pierda competitividad respecto al resto de Europa. Estamos perdiendo competitividad tanto en Primera como en Segunda División.

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Arranca la competición y nos encontramos con un problema gravísimo, un imprevisto tremendo que es el famoso virus. Ha destrozado a la sociedad en general y realmente ha afectado al fútbol. ¿Cómo se ha afrontado ese problema? Con muchísima determinación, que es otra cualidad del presidente de LaLiga y sus dirigentes. Se ha afrontado con rigor y determinación y se han puesto todos los medios para que el fútbol se pusiera en marcha. Es un hecho incuestionable y un mérito que ha tenido LaLiga. Se han tomado todas las medidas que había que tomar y más, todo desde la imposición. No ha habido ningún tipo de comunicación con ningún elemento activo de la competición, como pueden ser los entrenadores, los jugadores o los doctores.

Lo importante era que el fútbol tenía que volver porque la sociedad necesitaba que el fútbol arrancara. Y ha tenido un gran colaborador, que ha sido el Gobierno, que ha considerado que el fútbol era el motor que tenía que mover de nuevo la economía y había que poner todas las medidas y seguir una serie de protocolos, aunque fueran diferentes a los de la sociedad.

Surge una reunión maravillosa, brillantísima, con una gran capacidad de imaginación y con un gran soporte económico. Ya saben todos a lo que me refiero y se logra el gran pacto de Viana, donde todas las instituciones se ponen de acuerdo. Arrancamos, no es el fútbol de siempre, es el fútbol del VAR, es el fútbol de las interrupciones, es el fútbol donde no prioriza el juego y donde lo importante era arrancar y, sobre todo, terminar.

En este planteamiento nos dejamos de lado algo que ha sido vital y que ha sido el desencadenante de todo lo que ha ocurrido en las últimas semanas y es que nadie quiere regular lo que puede suceder si se dan casos de brotes o se volviera a decretar el estado de alarma. Nadie de la Liga de Fútbol Profesional quiso regular ni anticipar ese posible problema. Las declaraciones contundentes de su presidente fueron que aquí eso no iba a ocurrir y que si surgía un equipo con cinco infectados era una negligencia de ese equipo. Bueno, lamentablemente ha sucedido y como no hemos anticipado ni hemos querido regular posibles imprevistos, los ascensos y descenso y qué clasificación vale, nos hemos encontrado con el grandísimo problemón de la última jornada. Y alguien tuvo la brillante idea de adulterar la competición y jugar todos los partidos menos uno. Le hemos dado una pistola a aquellos que tratan de justificar lo que les ha ocurrido con sus resultados deportivos con los descensos, ya que no se ha jugado en la misma igualdad de condiciones.

Parece que eso sólo ha traído problemas a los equipos que han descendido. No, señor, eso también ha traído un gran problema a los equipos que van a jugar el playoff, como es el caso del Real Zaragoza. El Real Zaragoza jugó su último partido el 20 de julio frente a la Ponferradina y tenía designados sus partidos de playoff el jueves 23 y el domingo 26. Y el Zaragoza tenía todos sus elementos preparados para jugar ese encuentro. Y hemos estado durante dos semanas sin saber el rival y qué hacer. Totalmente abandonados, con un desamparo absoluto por parte de los dirigentes. Parece que el mundo se ha parado y que nadie ha salido a la palestra para resolver ese tipo de problemas.

Sucede que en estas casi tres semanas que llevábamos sin conocer las fechas, el Real Zaragoza va a afrontar un playoff de ascenso sin uno de sus jugadores más importantes, cuando nosotros no somos responsables de esa situación. Cualquier persona del fútbol profesional tiene que aceptar que estamos en una situación de desigualdad respecto a los demás. Yo recuerdo las palabras de los presidentes de la UEFA y de la FIFA hablando del ‘fair play’ deportivo. Que los logros deportivos sólo se pueden conseguir en el campo. Es evidente. El Zaragoza es lo que quiere, conseguir sus logros en el campo. Pero también acompañaron en su discurso que había que lograr que todos los equipos jugáramos en las mismas condiciones. Que todos teníamos que empezar y finalizar la competición con los mismos jugadores. Y nosotros hemos sido víctimas de esa situación. Eso sí que es jugar con desigualdad. Eso sí que es adulterar la competición, como aquellos que defienden que todos tendríamos que haber jugado a la misma hora en la última jornada. Y eso es lo que ha defendido el Real Zaragoza hasta estos momentos.

Nosotros sí que queremos jugar, pero en la misma igualdad de condiciones. Después podremos entrar en particularidades y en circunstancias donde se ve que estamos inmersos en un fútbol absolutamente adulterado y podrido. Es que huele todo a podrido. Son situaciones esperpénticas y rocambolescas, que rayan lo grotesco: cómo se ha jugado el Deportivo-Fuenlabrada, cómo tenemos que afrontar la competición, que nos quieren obligar a concentrarnos… Todo esto ya raya lo esperpéntico.

Por último, estoy totalmente de acuerdo con la actuación del Real Zaragoza por una cuestión de dignidad. Tenemos que actuar con responsabilidad, con seriedad y con respeto hacia nosotros pero también hacia los demás equipos que tienen aspiraciones de alcanzar su sueño. El Zaragoza, por esa defensa de su dignidad, no se puede dejar pisotear ni puede dejar que le humillen. Y por eso defiende esa suspensión del playoff. No estamos en la misma igualdad de condiciones. Lo demás son palabrerías y chorradas.

Por eso estoy totalmente de acuerdo con el Real Zaragoza, pero también digo que los logros deportivos hay que alcanzarlos en el campo, que es lo que ha hecho el Real Zaragoza a lo largo de toda su historia. El que quiera que se pase por las vitrinas del club y verá todos los títulos y dónde los hemos conseguido. Y eso es lo que hemos hecho a lo largo de toda la historia, defender nuestro crédito en el campo. Y es lo que queremos hacer ahora, pero sin adulterar la competición. Ahí sí que no debemos aceptar”.

Tras este discurso inicial, Víctor Fernández ha respondido a las preguntas de los medios de comunicación.

—¿Cómo están los jugadores física y anímicamente?

—Somos personas y como tales hay unas emociones y unos sentimientos. Yo creo que en el fútbol actual falta mucho corazón y sentimiento. No se nos puede olvidar que somos unos protagonistas que llevamos más de trece meses entrenando y compitiendo y viviendo situaciones muy fuertes y duras. Para los propios protagonistas y también para sus seres queridos. Hemos estado durante mucho tiempo que no sabemos qué hacer. En un fútbol tan profesionalizado, hemos estado tres semanas absolutamente parados. Nadie nos ha dado una respuesta ni una solución a nuestros problemas. Al revés, nos han aportado un problema que nosotros no teníamos. El equipo está entrenando bien, el equipo quiere competir, pero también ha habido fases en las que el equipo se ha desconectado porque es muy duro venir a entrenar sin saber para qué entrenas ni cuándo juegas ni contra quién juegas. Eso es muy difícil. Es una exigencia que a nivel mental provoca un esfuerzo increíble. Llegados a este punto, uno vive en la incertidumbre de qué va a pasar en las próximas horas y de todo ese ambiente de contagios que estamos sufriendo, especialmente en Aragón y más concretamente en Zaragoza. Vivimos también con esa tristeza y dolor, pero nos estamos preparando a conciencia para que si tenemos que jugar, hacerlo y dar la mejor respuesta. Todos los jugadores, a excepción del que dio positivo, están en condiciones y aquellos que están en una fase de recuperación de sus lesiones van mejorando y no sé si llegarán para el partido, pero ese es otro problema que forma parte del fútbol.

—Como hombre de fútbol, ¿qué opina de todos los comunicados de las últimas semanas?

—Desde que se finaliza esa última jornada incompleta transcurren seis o siete días en los que hay un silencio absoluto y el primer cruce se produce a través de comunicados de Twitter, algunos de ellos cómicos, ya que decían una cosa y al rato otra. Ha sido todo lamentable y por eso decía que parecía que el tiempo se había detenido durante esas fechas. A partir del domingo es cuando empiezan a filtrarse lo que va a decidir el Comité y mientras tanto nosotros nos vamos adelantando y diciendo que tenemos una problemática importante con un jugador porque tenemos una fecha de caducidad en su contrato porque el propietario de ese jugador no quiere poner que ese futbolista estará disponible hasta que finalice la competición. Nosotros ya trasladamos ese problema a LaLiga y a partir de ese momento ha sido esperar y ver información interesada. Cada uno ha ido a defender sus intereses, no le ha importado absolutamente lo demás y la consecuencia ha sido que nos ha arrastrado a todos a un problema de muy difícil solución. Ahora todos creemos que el problema del Fuenlabrada terminó con ese encuentro, que fue el gran partido de la mentira. En mis treinta años de profesional nunca he visto un esperpento como lo que se vivió el otro día. Fue algo terrible y un atropello a la integridad y a la pureza de la competición. Ahora hay que esperar, con todos los recursos que se han presentado, a ver lo que determinan el Consejo Superior de Deportes, LaLiga y la Federación.

—¿Sabe si el CSD ha respondido al recurso de alzada presentado ayer por el Real Zaragoza?

—El club no me ha dicho nada de que haya una respuesta definitiva. Es un tema de los abogados y nosotros nos estamos preparando para afrontar el partido, siempre y cuando nuestros dirigentes nos digan que tenemos que jugar. Aquí sólo se habla de descensos y de que hay que conseguir los logros deportivos en el campo. Por supuesto, pero a mí que me resuelvan el problema que me han generado ellos, los que han provocado con su negligencia e irresponsabilidad el problema futbolístico que tiene el Zaragoza. Porque yo quiero competir en el campo, como hemos demostrado durante toda la temporada, pero ahora no nos dejan competir en las mismas condiciones. Eso es lo único que quiero, que me resuelvan a mí ese problema. Todo lo demás de abogados, recursos, el CSD a mí me da igual, que yo lo que quiero es jugar, pero jugar en las mismas condiciones, no jugar una competición que está total y absolutamente adulterada y contaminada. Y que huele a podrido y lo digo de verdad.

—¿Tiene la sensación de que el Real Zaragoza está siendo maltratado?

—Nunca ha habido corporativismo en la sociedad en general y en el mundo del fútbol en particular. No podíamos pensar que ahora iba a ser la excepción. Ni tampoco lo van a tener los clubes que reclaman su plaza en Segunda División, independientemente de lo que haya ocurrido deportivamente. Cada uno va a defender sus intereses. Ya han dicho clubes que lo último que pueden permitir es que se amplíe la Primera y que tampoco se puede ampliar la Segunda. ¿Por qué? Porque esto es un negocio y el negocio se está imponiendo al sentimiento de la afición y a la pasión. El negocio está arrancando el alma del fútbol, que son los aficionados. Y como negocio interesa un determinado número de equipos y que el reparto televisivo sea de una manera diferente. Por tanto, cada uno defiende sus intereses de la mejor manera, pero estamos en un terreno muy peligroso porque hay una gran inseguridad jurídica y esto va a ir para largo y nos podemos encontrar con alguna sorpresa desagradable dentro de unos meses como ha ocurrido en el baloncesto porque imagino que todo va a ir hasta las últimas consecuencias. Vamos a ver, pero aquí lo que se ha tratado es salvaguardar el negocio.

—¿Cómo evoluciona el jugador infectado? ¿Cree que podrá contar con él en el playoff?

—No tenemos ninguna posibilidad de recuperar a ese jugador para el partido de ida y creo que muy pocas para el de vuelta, pero ése no es el problema. Eso forma parte de la competición. Durante cinco meses hemos tenido rigurosidad, ha habido un grandísimo control, todo ha estado súper profesionalizado en cuanto a que hemos manejado bien todas las situaciones y hemos tenido la desgracia, como otros equipos, de perder a un jugador, pero todos los demás están limpios, por lo que nosotros sí que podemos jugar.

—¿Cree en LaLiga?

—Lo que sí que está claro en las últimas semanas es que ha habido muy poca transparencia y muy poca rotundidad. Ha habido mucho oscurantismo y se han dicho muchas medio verdades, que es la peor de las mentiras. Por ejemplo, se ha dicho que LaLiga nos estaba esperando a nosotros por el positivo. Vamos a ver, señores, nosotros cuando terminamos el partido del Fuenlabrada era 20 de julio y teníamos previsto jugar el 23 y el 26. Nuestro positivo se dio el miércoles 29, diez días después de aquel encuentro. A nosotros nadie nos ha esperado porque hemos tenido un positivo. ¿Cómo se puede decir esa media verdad? Si nosotros hemos estado dispuestos siempre para jugar el playoff, el problema es que no nos han dado rival, nos han eliminado fechas y con eso hemos roto y con eso nos han roto la igualdad de condiciones porque hemos perdido un jugador por el camino. Esa es la gran verdad. Por eso digo que en un fútbol tan profesionalizado haya que esperar a la reunión de unos comités diez o doce días después del incidente. No puede ser que tengamos que esperar seis o siete días para que se diga que el presidente de LaLiga es el responsable de todo lo que ha acontecido en ese partido porque el Fuenlabrada ha actuado siguiendo todas las pautas de la Liga de Fútbol Profesional. ¿Por qué tan tarde? ¿Por qué se aparece de esta manera? Yo no sé quién ha cometido la negligencia ni por qué se ha producido. Lo único que digo es que todos los clubes hemos ido a ciegas con lo que se nos ha determinado desde LaLiga. Nos han dicho cuándo había que entrenar, nos han dicho cuándo había que descansar, nos han dicho cómo había que hacer los viajes, nos han puesto los mejores medios, nos han llevado en avión, nos han llevado a hoteles de cuatro y cinco estrellas, nos han tratado a cuerpo de rey… Maravilloso en ese apartado, pero si los clubes no hemos hecho nada que no haya sido bajo la supervisión del inspector de la Liga de Fútbol Profesional, dudo que el Fuenlabrada se haya saltado eso. Y si se lo ha saltado de verdad, es que no tiene que durar ni un segundo en la competición. Yo no sé por qué ha surgido esto tan tarde. Si los clubes hemos estado sometidos desde el primer momento a la imposición y a las reglas de LaLiga. Si yo le decía a mi director general que preguntar qué ocurre si se vuelve a detener el fútbol o si en un equipo se dan cuatro o cinco positivos, independientemente de que Tebas diga que eso no va a ocurrir. Esas son las dudas que genera esa competición, esa poca transparencia, esos mensajes cruzados y esas medias verdades. Eso es lo que le hace dudar a uno de la pureza de esta competición. Y que no nos vengan ahora diciendo que si queremos o no queremos jugar en el campo. Queremos jugar en el campo y siempre lo hemos demostrado en nuestra historia. Siempre, como todos los clubes, pero lo que no podemos hacer es dejarnos atropellar. Queremos jugar en las mismas condiciones, si sólo pido eso, nada más. Me da igual que el Almería o el Girona tenga veinte millones más de presupuesto. Nosotros con nuestra humildad trabajaremos con nuestras armas, pero con las nuestras, las que hemos tenido desde el principio de la competición, no las que tenemos en estos momentos, que no son las mismas. Es lo único que pido. No creo que sea pedir mucho. Y por eso también me sorprende totalmente la inacción del Gobierno ante la situación que se está viviendo en el fútbol actual y lo que ha estado ocurriendo en estas tres últimas semanas. Que yo no le resto méritos a lo que ha hecho LaLiga anteriormente, que he empezado diciéndolo en mi discurso porque si no parecería que es un discurso ventajista e interesado y no lo es.

—¿Siente que al Real Zaragoza se le ha dado la espalda a nivel nacional tanto en los medios de comunicación como en las instituciones?

—En primer lugar tengo que dar las gracias y felicitar a nuestras instituciones. La salida del presidente de Aragón, del señor Lambán, ha sido absolutamente contundente ante lo que él ha considerado una adulteración de lo que es esta competición y ha hecho una defensa a ultranza de la pureza y de la verdad. Lo mismo que el alcalde o el propio presidente de la Federación Aragonesa de Fútbol. Yo sólo puedo tener palabras de agradecimiento a ese respaldo. Es posible que nosotros no hayamos tenido el altavoz que han tenido otros clubes a la hora de reivindicar que sus intereses se han visto lesionados por lo que ha ocurrido en las últimas semanas, pero porque en su caso eran hechos consumados y esos hechos consumados son que hay unos descensos. Tratan de defender la adulteración de la competición por no jugar todos en las mismas fechas y horas y eso ha podido alterar el desenlace final de la competición. Honestamente, tienen razón, si no para qué sirve poner los mismos horarios para el último partido. Es sentido común. Pero lo mismo que no hubo paciencia para esperar 24 horas y hacer una consulta general a todos los clubes y tomaron esta decisión extrema pensando que era lo mejor, también tenían que tener pensado que a las 72 horas había que jugar un playoff. Por tanto, creo que ha habido más ruido de cara a hechos consumados, como han sido los descensos, que en algo que todavía no ha ocurrido, pero que su arranque está totalmente adulterado porque no estamos en la misma igualdad de condiciones. Y por eso nosotros estamos reivindicando nuestros derechos. Los otros van a hechos consumados, estos aún son hechos a producir. Por eso alzamos la voz mucho antes de que se juegue este playoff y así quiero entenderlo y no porque el Zaragoza de segunda y sea una ciudad de segunda. Zaragoza es una ciudad grandísima y la afición del Zaragoza es fantástica. Por eso tenemos 27.000 abonados y por eso llenábamos siempre el campo. Eso es algo que nos han arrebatado y que lo tenemos que aceptar. Dicen que para todos es igual, pero no es así. No es lo mismo jugar tus partidos con 27.000 personas que aquellos que defienden sus partidos con 5.000 seguidores. Lo digo con todos los respetos y tienen los mismos derechos que nosotros, pero no es lo mismo. Hay que aceptarlo porque eso era para todos igual. Por tanto, quiero pensar que esto ha sido así porque lo del descenso era un hecho consumado y lo del playoff… Es que tenemos toda la razón. Es la única verdad. Cualquiera de este mundo profesional tiene que ver que no tenemos las mismas condiciones de igualdad respecto a los demás.

—¿Cómo se encuentran Guitián, Javi Ros y El Yamiq? ¿Va a poder contar con ellos?

—Están muy bien. Guitián ya lleva dos semanas de entrenamientos con regularidad, Javi Ros aún está lejos de su forma pero está teniendo una muy buena recuperación de su lesión y estos últimos días ha mejorado muchísimo respecto a la semana pasada, llevando una línea ascendente y muy positiva, y El Yamiq aún no ha hecho ningún entrenamiento con el equipo, pero está dentro de lo que se esperaba por el cuerpo médico. No sé si podrá jugar, si es que se juega, esta primera eliminatoria del playoff.

—¿Qué le parece la insolidaridad de algunos clubes? ¿Le parece sospechosa esa actitud de algunos o que el Almería haya accedido a concentrarse?

—No me sorprende nada. Ya he dicho que hay muy poco corporativismo en la sociedad y menos la va a haber en el fútbol, donde hay tantos intereses. Cada uno defiende lo suyo y cuando a uno le toca es cuando salta y buscará los apoyos que le puedan acompañar en su reivindicación. Y con lo del Almería soy absolutamente respetuoso con la actitud y el comportamiento de cada club. Si el Almería quiere concentrarse durante estos catorce días, está en su derecho. Me parece absolutamente legítimo lo que haga. Son libres de hacer lo que quieran y por tanto también tendrán que respetar lo que haga el Real Zaragoza. Entendemos que es una norma que no se sostiene en ley y que es anticonstitucional. Nosotros entendemos que nos vamos a concentrar de una manera determinada y nada más, siempre siguiendo todo el rigor y cuidado para no cometer ninguna irresponsabilidad porque nosotros lo que queremos es competir y con nuestros mejores elementos, pero no aceptamos ningún tipo de imposición que vaya contra la ley y esté fuera del convenio que existe entre la AFE y LaLiga. Lo único que puedo decir es que estamos actuando legalmente y los demás que hagan lo que crean oportuno.