Sin que la competición de esta temporada haya aún terminado y con todas las dudas que seguirán al presente curso de fondo, los directores deportivos trabajan para aligerar su masa salarial lo máximo que puedan. Porque si hay una certeza es que tocará apretarse el cinturón. Será complicado repetir tope salarial en un fútbol diferentes, sin grandes traspasos como otros años y con la incertidumbre sobre las campañas de socios, que parece que irán a menos este curso. En ese escenario, Francesc Arnau, director deportivo del Oviedo, trata de contener los gastos de su plantilla.
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Ya ha anunciado el catalán que el grueso de los futbolistas que acaban contrato no seguirán vestidos de azul. Solo Berjón y Christian tienen opciones de continuar pero el club les presentará una oferta a la baja, por las condiciones ya descritas del mercado.
Incluso el Oviedo baraja la posibilidad de reducir el sueldo de algunos futbolistas, ofreciéndoles a cambio más años de vinculación con la entidad carbayona. La clave es que los gatos en la plantilla no se vayan por las nubes para poder fichar más futbolistas que den un salto de calidad.
