El Nápoles presiona a la UEFA para jugar en campo neutral

El Nápoles presiona con fuerza a la UEFA para jugar en campo neutral el Barça-Nápoles el próximo 8 de agosto y así no hacerlo en el Camp Nou. Esas presiones han obligado a la UEFA a pedir al Departamento de Salud de la Generalitat, que es quien tiene las competencias en Sanidad si no está activo el Estado de Alarma, un informe para asegurarse de que existen garantías de jugar el Barça-Nápoles del próximo 8 de agosto (21:00 horas) sin poner en riesgo la salud de los protagonistas. La UEFA ya tiene en poder el informe en el que se garantiza la seguridad y, de hecho, la misma UEFA tiene una reunión este viernes con el Barça para montar el dispositivo del partido. De momento, el máximo organismo del fútbol europeo mantiene el encuentro en el Camp Nou "como estaba planeado".

La situación en Cataluña, donde aumentan los casos de Covid-19, está siendo aprovechada por  el Nápoles, que presiona con fuerza para intentar que el Barça pierda el factor campo aunque el choque sea a puerta cerrada. Hace un par de días, el diario O Jogo publicó que tanto Guimaraes como Oporto están preparadas para recibir el partido si es necesario. Según pudo saber As, en Lisboa también se está preparando un dispositivo en caso de que hubiera que jugar allí el partido.

El Barça ya expresó su deseo de jugar el partido de vuelta de octavos de final de Champions en el Camp Nou porque lo considera de ley pese a que sea una desventaja hacerlo sin público después de que el Nápoles tuviese el respaldo de San Paolo en la ida. En el club esperan que la situación no pase de una consulta de la UEFA al Departamento de Salud de la Generalitat y el partido se dispute sin problemas en el Estadi. De momento, el informe del Departamento de Salud es claro. Si Catalunya es segura para que que vengan turistas extranjeros, lo es para que se juegue el Barça-Nápoles.