GONZÁLEZ GONZÁLEZ
González: "Conocer el reglamento te permite hacer triquiñuelas"
José Luis González González habla con AS tras colgar el silbato. Seguirá vinculado al árbitraje desde la sala VOR.
José Luis González González (Ponferrada, 1974) pitó por última vez en Primera División. Con 45 años se retira del campo tras once temporadas al más alto nivel y 221 partidos en sus botas. Deja el césped, pero seguirá realizando su labor como árbitro de VAR, donde ayudará a sus compañeros a tratar de eliminar los errores y hacer más justo el fútbol.
¿Cómo se siente ahora que se ha retirado y no volverá a pitar?
Es complicado. Estoy un poco triste por ese aspecto. Llevo treinta y dos años en esto. Me metí aquí siendo un niño y todo lo que he hecho en mi vida ha sido dentro del arbitraje. He acabado mi carrera, sacado mi oposición de policía, me he casado y he tenido a mis hijos como árbitro. Que yo sea consciente, todo lo que he hecho en vida hasta ahora ha sido dentro de esta bendita profesión. Decir que no voy a volver a pisar el césped al nivel que estaba si me genera un poco de tristeza. Pero también estoy muy contento de haber llegado al final y con la trayectoria que he tenido. Me he marchado en el pico más alto de mi carrera. Son sentimientos contrapuestos, la tristeza de abandonar lo que tanto he disfrutado y la felicidad de haber llegado al final. Hay gente que por lesiones o por momentos complicados no ha llegado.
Colgó el silbato en un Sevilla-Valencia
Fue un fin de semana especial. Desde que cogí la maleta y el coche hasta que realicé el pitido final. Fue fantástico. Lo tenía muy asumido y estaba muy preparado. Los mensajes de apoyo fueron tantísimos que estoy terminando de contestarlos. Eso muestra que he dejado huella en la gente como persona y como árbitro. Todos lo hacemos intentamos rozar la excelencia y con la mejor voluntad. Importa el mensaje que dejas fuera. Todas estas muestras de cariño me llenan mucho.
Al ser su última temporada, ¿Ha pitado con menos presión y soltura y ha disfrutado más a que si se jugase el descenso?
Cuando llegas a Primera el nivel de exigencia que te pones te puede perjudicar. Puede hacer que estés demasiado estresado en el campo. También les pasa a los jugadores. De las once temporadas, salvo los tres o cuatro primeras que son en las que tienes que aceptarte, en el resto mi nivel ha sido muy parejo. Consigues ese momento que, aunque el campo y el partido esté patas arriba, tus pies están firmemente en el suelo y pase lo que pase sabes que vas a tener la situación bajo control. Llegar a esa percepción, que notas que los jugadores te tienen ese respeto y sabes cómo tratarles o cuando está un futbolista nervioso y le dices dos palabras para que se calme, eso sólo te lo da el tiempo. Yo lo conseguí a partir de la tercera o cuarta temporada. A partir de ahí he disfrutado tanto que cada domingo era ir a pasarlo bien a un campo.
¿Seguirá vinculado al arbitraje o se acabó?
Hablé hace poco con Carlos Velasco, nuestro presidente, y me dijo que contaba conmigo para seguir haciendo la faceta de árbitro de VAR. Yo ya le he dicho que encantado y que seguiré ahí para lo que necesiten.
Va a ser el último árbitro que se jubilará por edad. A partir de la próxima temporada los que lleguen a 45 años no estarán obligados a retirarse y será una decisión de cada árbitro.
Yo desde hace muchos años tenía este momento como la meta. No había salido esto. Mi meta era llegar aquí y me he preparado para esto. He preparado mi físico para llegar a los 45 con un nivel óptimo de forma. He llegado aquí y me marcho tremendamente orgulloso y satisfecho de lo vivido en el campo y de los compañeros de los que me he rodeado. Si me dices si seguiría un poco más, pues bueno. Quizás claro que seguiría porque esto me encanta.
Es policía y muchos compañeros del CTA también lo son o pertenecen al ejército. ¿Tiene alguna relación el tipo de vocación para ambas cosas?
Hay varios compañeros que estamos enrolados en la Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado. Al final te da un plus de credibilidad. Son dos facetas en las que el rigor tiene que ser máximo y el saber tratar con la gente de una manera desde el lado de ley. Ambas profesiones van muy parejas. Siempre te va a aportar algo más.
¿Por qué elegiste ser árbitro?
Yo jugaba al fútbol. Fui, soy y seguiré siendo un enamorado del fútbol. Hasta ahora no lo he podido practicar por la profesión que tengo y el riesgo a una lesión. Ahora con mis hijos lo practicaré más. Yo jugaba en el equipo de mi pueblo, pero se deshizo y casualmente teníamos un vecino que era árbitro de Tercera y nos animó a mi hermano y a mí. Nos contaban muchas cosas que nos atraían hacia esa figura. Y probamos. Una vez que te gusta vas a ser árbitro para toda la vida. Estoy muy feliz que aquel hombre nos propusiera hacernos árbitro por todo lo que he crecido y disfrutado.
¿Tiene algún momento especial que siempre recordará?
Hay muchos, pero me quedo con el ascenso a Primera. Me casaba el 4 de julio y el 1 me comunican que asciendo. Quedé con mi mujer para ir haciendo cosas de la boda y hablando le digo que me han llamado del Comité. En ese momento nos desbordó la felicidad. Y la boda se convirtió en una triple o cuádruple celebración. Fue una fiesta que más grande no se puede imaginar. Fue el mejor regalo de bodas.
¿Ha tenido algún momento complicado?
Pues tiene que ver con ese momento. A la vez que me comunican el ascenso, mi amigo que era asistente desciende. Y él estaba en la boda también. Fue la cara opuesta de la moneda. Fue raro.
Y de estadios, ¿Cuál ha sido el más especial?
Hay dos que me encantan. Uno será de Primera la próxima temporada, que es el del Cádiz. Es un estadio fantástico. El otro es El Molinón. La gente es la leche en esos campos. Te podría decir muchos más. Pero en El Molinón y Carranza es espectacular y fantástico el ambiente que vives.
¿En qué debería mejorar el arbitraje?
Lo nuestro va tan condicionado al resultado final que es sumamente complicado. Hemos mejorado en tantas cosas… Ahora cuando ves al árbitro lo ves con un físico imponente y una preparación increíble en reglas de juego, idiomas, técnica, en aplicaciones para trabajar los partidos… Al final todo va unido al resultado. Si hay jugadas grises todo eso se queda a un lado. Nuestra labor es tan ingrata. Haces 95 minutos fantásticos y en una decisión te tira el trabajo al suelo. Nadie se va acordar por los 95 minutos maravillosos. Es ventajosta decir en qué se puede mejorar. Hemos avanzado tantísimo y hemos dado pasos increíbles. Se está a un nivel muy alto. Seguirá habiendo errores. Es como cuando llega el mejor futbolista que te puedas imaginar en un disparo la echa fuera y en el 99% de las otras veces lo mete. Pero falló esa.
¿Los jugadores y entrenadores entienden las normas? ¿Se saben el reglamento?
El fútbol es tan generoso, y por eso mueve a tanta gente, que sin saber nada de las reglas puedes jugar. Salvo tocar el balón con la mano, puedes hacer prácticamente de todo. En pocos deportes, que sin haber visto las reglas puedas practicarlo. Eso te lo permite el fútbol. Ahí opina todo el mundo y sabe todo el mundo. En España todo el mundo tiene la faceta de saber sobre entrenar y arbitrar. Todo el mundo sabe. Es fantástico que el fútbol dé tanto juego. Con la idiosincrasia de los españoles nos metemos por qué no pone un entrenador a este y a lo mejor no sabemos que el jugador está entre algodones. Y con las decisiones de los árbitros pasa igual. Como no hemos leído el reglamento ni las regla que tienen. O se creen lo que dice alguien que tampoco tiene idea del reglamento y ya lo creen como verdad absoluta.
Pero no sólo a la gente, también los jugadores vemos a veces protestando o pidiendo cosas que reglamentariamente no son posibles…
Normalmente, algunos equipos tienen personas lucidas al frente que piden que vayamos a dar una charla básica sobre reglas de juego. No hay ninguna cantera en España que les enseñen reglas de juego a sus futbolistas. Conociendo el reglamento puedes sacarle más partido. Podrían hacer más triquiñuelas. Y así sacar beneficio a algunas jugadas. Hay gente que se ganan millones en preparar a su cantera y luego no tienen a una persona que forme a sus cuerpos técnicos y jugadores. A mi eso me parece fundamental. Explicarle las modificaciones, las dudas, en qué sacarle partido o en qué evitar que el contrario lo hago. No se trabaja en ningún lado y es una parte olvidada. Se sacaría mucho partido. Lo puedes hacer cuando tienes un conocimiento profundo del reglamento.