LaLiga del nuevo fútbol

La Liga pone punto final a una temporada de once meses que ha estado marcada por diversos factores y que la ha convertido en una de las más atípicas de toda la historia. Siendo un fútbol muy diferente del que era costumbre. El motivo principal ha sido el coronavirus, una pandemia que no sólo ha sacudido al fútbol, sino al mundo entero. Pero también han existidos otros aspectos a nivel futbolístico que han acarreado muchas polémicas, como son algunas de las novedosas normas. Algo que ha llevado a muchos entrenadores y jugadores a levantar la voz de manera negativa al camino que está siguiendo este deporte. Ejemplo de ello es Paco Jémez, el más crítico: "El fútbol se ha convertido en una bazofia y una vergüenza". Reglas tan controvertidas como la 'ley del talón' y el aumento de expulsiones, el récord de penaltis, el adelantamiento de los porteros, las manos...

Un fútbol sin aficionados

Uno de los grandes motivos del éxito del fútbol profesional y su repercusión en el mundo son los aficionados. El alma de este deporte que ha dejado huérfanos a los estadios y a los futbolistas durante el último tercio de temporada. Tal vez este vacío en las gradas durante once jornadas unido a los tres meses de parón han sido los dos acontecimientos más inesperados en el transcurso de la temporada. Algo insólito y que nadie se esperaba ni a principio del curso ni del año. Por el bien de la industria del fútbol, el campeonato logró reiniciarse, con estrictas medidas de seguridad sanitarias y ha llegado a su fin. De esta manera, los clubes han logrado asegurar casi la totalidad de los ingresos de los derechos de televisión, la gran fuente de ingresos de la mayoría de equipos de Primera y Segunda División.

La ley del talón y el aumento de las expulsiones

La primera gran polémica de la temporada surgió a raíz de la denominada 'ley del talón'. El Comité Arbitral hizo especial énfasis en que sus colegiados no dejaran pasar ni una acción de juego brusco grave y la castigaran con roja directa. Durante las primeras jornadas se vieron bastantes casos en los que había jugadores expulsados por entradas al talón, pero tras un seminario arbitral el ritmo bajó de expulsiones por este motivo, ya que se matizó que en caso de un roce, jugada de arrastre (si el impacto fuese como un zarpazo que se va deslizando por la pierna) o si hay bota de por medio sólo debería mostrarse amarilla. Fran Escribá, entrenador del Celta en el inicio de la campaña, fue tajante ante la situación que se vivió de tantas expulsiones: "Creo que dentro de tres jornadas o después de Navidad se cambiará. Con esta norma nos cargamos el fútbol. Esto no es fútbol. Yo no pagaría para ir a ver un partido de 11 contra 9".

Las rojas directas han aumentado considerablemente esta temporada respecto a las anteriores. Se han mostrado 43 este curso (31, en la 18/19; 27, en la 17/18; 34, en la 16/17, y 35, en la 15/16). Pero es destacable como las expulsiones han aumentado en las últimas jornadas de la temporada, mucho más que en las primeras cuando surgió toda la polémica de la 'ley del talón'. En las cuatro primeras jornadas se mostraron 8 rojas directas, en las cuatro últimas del campeonato se han enseñado 16. El doble. Desde el Comité Arbitral achacan a este aumento no a una variación de la norma y hayan pedido mayor castigo (aunque sí es una de los aspectos que siempre piden a sus árbitros que vigilen y apliquen la norma si existen entradas que ponen riesgo la integridad física del jugador que la recibe), sino que a la trascendencia de los últimos partidos al tener varios de los objetivos (título, Europa y descenso) en juego, puede llevar a mayor intensidad en los encuentros.

Penaltis

Esta Liga sin duda ha sido la de los penaltis. Se ha batido el récord de la temporada 1989/1990, en la que se señalaron 140. En esta edición de LaLiga se han pitado 149. Un incremento también notable respecto a campañas anteriores (en la 18/19 fueron 130 y 113 en la 17/18). El incremento ha sido notable y es que se están pitando penas máximas con el mínimo contacto y por las que el VAR no entra al no considerar que se trata de un error claro y manifiesto.

En cuanto a penaltis también ha existido una protesta por parte de los porteros. Ya que también se ha estrenado una nueva regla que afecta a los guardametas durante su lanzamiento. La IFAB ha dado más libertad de movimiento a los porteros, pasando de tener los dos pies sobre la línea de gol a tener sólo uno. Pero como todo, esta medida tiene una de cal y otra de arena. El problema ha sido que desde esta temporada cada vez que un portero ha parado un penalti y estaba adelantado han tenido que repetir el lanzamiento y han visto una amarilla. Un castigo que consideran excesivo y que les lleva a no arriesgarse a parar un penalti porque si ya tienen una podría ver la segunda y dejar a su equipo con un jugador menos.

Manos

Esta temporada ha entrado en vigor el nuevo reglamento respecto a las manos. Criterios que hay que tener en cuenta la naturalidad del brazo, si la mano ocupa o no un espacio, si es voluntaria, si está por encima del hombro, si propicia un gol... Diversos criterios que han disparado también las penas máximas por mano. Es más, ya se especula en que algunos futbolistas en vez de centrar, buscan la mano del defensa porque casi siempre será señalada la falta, ya sea porque lo ve el árbitro o el VAR. Hay que tener en cuenta que de cara a la próxima temporada se añade la aclaración de que todo balón que impacte en la parte del brazo que sea superior a la axila se considerará hombro y no mano.

El conjunto de todos estos criterios que han entrado a la vez y el aspecto desangelado de las gradas de los estadios ha provocado que esta temporada se haya vivido un fútbol muy diferente del que venía siendo costumbre.