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MARBELLA-PEÑA DEPORTIVA

La Peña Deportiva le da un revolcón al Marbella y sigue haciendo historia

La Peña Deportiva de Santa Eulalia dio un soberano repaso al Marbella y sigue haciendo historia. Fran Núñez e Higor Rocha, autores de los goles.

Actualizado a
Esteban Granero en acción
Esteban Granero en acciónPaco RodríguezDIARIO AS

La Peña Deportiva sigue haciendo historia. El equipo de Santa Eulalia, recién ascendido de Tercera, derrotó contra todo pronóstico al Marbella, en teoría favorito, pero que jamás pudo hincar el diente a su rocoso adversario que se llevó el partido sin apenas pasar apuros a base de trabajo, disciplina e infinita garra. Unas cualidades que despedazaron a un Marbella que tuvo la posesión, fue honrado en su esfuerzo, pero jamás encontró el camino pada superar a un adversario extraordinario.

La Peña sorprendió al Marbella a las primeras de cambio. Fran Núñez, solo, remataba a la red un buen centro de Marc Fraile. Mazazo para los de Cubillo que vieron tres minutos después, cómo el colegiado anulaba un gol a Óscar García por posible fuera de juego. El Marbella se echó para delante, pero los de Santa Eulalia controlaban sin agobios ni lucimiento para los delanteros de Cubillo. Con ventaja ibicenca se llegó al descenso. La posesión del Marbella no podía con la disciplina de la Peña.

En busca de ideas nuevas el Marbella sacó a Bernal y Samu Delgado por Elías y Paulo Vitor que no estuvieron afortunados. Los marbellíes buscaban las entradas de sus laterales Saúl y Redru, pero los baleares no renunciaban a las contras protagonizadas en especial por Fraile y Núñez. Copete, excelente central, no daba ventajas al dueto Óscar-Manel.

A los 55’ en otra acción a balón mal defendida por el Marbella, Higor Rocha, con la colaboración de Dani Pérez (le dio el balón en la cara) remató a la red una falta lanzada por el siempre eficaz Marc Fraile. El Marbella estaba desarbolado y no podía con el derroche de facultades y trabajo de su admirable adversario. A base de arreones el Marbella trataba de meterse en el partido, pero su verdadera primera ocasión (además del gol anulado a Óscar). Las oportunidades, a la contra, fueron de la Peña que, tranquilamente, pudo meter dos o tres goles más. La Peña, con todo merecimiento, se ha ganado el derecho a soñar y aplaza para mejor ocasión el gran proyecto del Marbella.