Carvajal, Lucas Vázquez y Nacho vuelven a celebrar en el Di Stéfano
Los tres canteranos componían la plantilla del último ascenso del Real Madrid Castilla a Segunda División (2011-201), a las órdenes de Toril.
El último ascenso del Real Madrid Castilla a Segunda División data de la temporada 2011-2012, en la que el equipo dirigido por Alberto Toril se proclamó, además, campeón de Segunda B con un conjunto en el que jugaban Dani Carvajal, Lucas Vázquez y Nacho Fernández que, ocho temporadas después, vuelven a celebrar un éxito en el estadio Alfredo Di Stéfano, esta vez con el primer equipo. La joya de la corona de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, inaugurada en 2006, ha sido la casa habitual del primer filial blanco y del Juvenil A, para sus partidos de la UEFA Youth League, pero tras la reanudación de LaLiga Santander por el parón provocado por el coronavirus también lo ha sido para el equipo dirigido por el francés Zinedine Zidane, ya que el club ha aprovechado la ausencia de público en los encuentros para avanzar las obras de modernización del Santiago Bernabéu.
Un cambio que le vino bien al Madrid porque le permitió dejar atrás la irregularidad mostrada en los partidos en casa y, tras la victoria cosechada este jueves frente al Villarreal (2-1) merced al doblete del francés Karim Benzema, en los minutos 28 y 77, este último de penalti, han logrado conquistar el 34º título de Liga en su historia. Así, Carvajal, Lucas Vázquez y Nacho revivirán momentos de aquel 27 de mayo de 2012 en el que tras imponerse al Cádiz por un global de 5-1 lograron el ascenso a Segunda que más tarde refrendaron con el título de la categoría tras vencer por 6-0 al Mirandés. Un Castilla histórico con una generación en la que jugaron nombres reconocidos en el mundo del fútbol como Jesé Rodríguez, Álvaro Morata, Joselu Mato, Omar Mascarell y Álex Fernández, entre otros. Eso sí, la celebración del LaLiga Santander poco tendrá que ver con la de aquel ascenso ya que, además de tratarse de un título de mayor calado, la ausencia de público en las gradas del Di Stéfano y el protocolo sanitario para evitar la propagación del coronavirus lo hacen todo más frío. EFE