TENERIFE
Indignación por las decisiones de Ocón Arraiz
"El partido estuvo condicionado por el arbitraje", se lamentó Ruben Baraja. Ni el colegiado riojano ni el VAR pitaron dos claros penaltis muy protestados por los blanquiazules.
La expedición del Tenerife regresó a casa nada más acabar el partido contra el Alcorcón (0-0) mascando bronca por lo que sucedió durante el encuentro en Santo Domingo, donde el colegiado y el VAR fueron el centro de las críticas. "El partido ha estado condicionado por las decisiones arbitrales. Yo me equivoco y los árbitros pueden no ver cosas, pero para eso está el VAR y tengo la sensación de que hay dos o tres penaltis que pudieron cambiar el partido", opinó contrariado Rubén Baraja en sala de prensa.
Para los blanquiazules, en la primera mitad, Dani Gómez fue objeto de falta por el portero local después de rematar a puerta y en la segunda el mismo delantero fue agarrado dentro del área por un defensa local. Quizás la más polémica fue una mano de Elgezabal que cambió la dirección del balón. Las protestas de todos los visitantes -sobre todo en estas últimas dos acciones-, no convencieron a Daniel Ocón Arraiz para que revisara la jugada en el monitor.
Además, para el técnico del Tenerife hay "una segunda amarilla a Boateng en la primera parte. El VAR tiene que aclarar situaciones, como la última del fuera de juego en el gol. Ha condicionado el resultado", insistió Baraja, visiblemente molesto.
"Hacemos muchas cosas para ganar, era un partido fundamental y merecimos ganar. Hay cosas que han influido en el resultado", dijo por tercera vez el míster. "Solo puedo agradecer el esfuerzo de los chicos, han hecho un trabajo brutal contra un equipo muy físico. Hemos hecho lo suficiente para ganar pero hay situaciones que no puedes controlar y hay herramientas. Si es penalti, es penalti. En Málaga nadie valoró si la mano de Aitor Sanz era involuntaria o no. Yo seguramente me equivoco como el que más, pero para eso está el VAR", se quejó.
Baraja insistió en que todo lo que es interpretación y si el árbitro no lo ve "lo avisan desde el VAR. Las manos eran una cosa en la primera parte de la temporada y ahora otra. Era muy importante tener una mejor actuación arbitral no que nos ayudara, solo que hubiera revisado jugadas. Nos vamos tristes porque merecimos más", finalizó contrariado.