La Ponferradina se instala en el día de la marmota
Como ante el Lugo, el equipo berciano perdonó al Numancia y terminó cayendo en los minutos finales. El descenso acecha a los de Bolo.
Como Bill Murray en 'Atrapado en el tiempo' ('El día de la marmota' en su título original y en la memoria colectiva), la Ponferradina parece atrapada en un bucle temporal en el que los hechos se repiten una y otra vez. En Soria, como ante el Lugo el miércoles, el equipo berciano fue mejor que su rival, perdonó sus ocasiones para llevarse el partido (con la colaboración del portero rival) y terminó perdiendo con un gol en los últimos minutos.
Bolo reconocía tras caer en Los Pajaritos que el equipo sufre un bloqueo mental en el tramo final de los partidos al ver que no es capaz de decantar el resultado de su lado. Donde en las primeras partes se ve presión, posesión y llegadas al área rival, a partir del minuto 60 todo se convierte en desconcierto, errores y, lo peor de todo, goles en contra.
Por supuesto, tratándose de fútbol, en el gol está la clave. La Deportiva no sólo se ha convertido en un conjunto más vulnerable de lo que acostumbraba, sino que también se ha olvidado de marcar. Son cuatro partidos consecutivos sin ver portería y todos se han resuelto con derrota. La que hace la quinta de esta racha fue la primera, en el tiempo de descuento en Riazor, el lugar donde todos coinciden en señalar el inicio de esta caída en barrena.
La situación en El Toralín ya es desesperada y sólo vale ganar al Almería el viernes para que la Ponferradina siga dependiendo de sí misma. Volviendo al cine, los de Bolo tienen cinco días para, como Bill Murray, comprender y usar en su favor la maldición del día de la marmota.