Villar irrumpe en Colón, manda a callar al Pulpo y coge la Copa
El expresidente de la Federación se presentó por sopresa en la plaza madrileña calado con una gorra deportiva, gritó "callaté" al speaker de la RFEF y se hizo una foto con el trofeo de Sudáfrica en el décimo aniversario del Mundial 2010.
Genio y figura. El ex presidente de la Federación (RFEF), Ángel María Villar, se presentó en la mañana de este sábado en la Plaza de Colón de Madrid, mandó callar al 'speaker' de la RFEF, Carlos Moreno, 'El Pulpo', guardó cola para hacerse una foto con el trofeo de la Copa del Mundo, posó junto a decenas de aficionados, saludó a los empleados federativos y fuese por donde había venido, calado por cierto con una gorra deportiva del mismo patrocinador técnico que el de la Selección.
Villar, que llegó a Colón caminando desde el barrio de Ventas, donde reside, trató de pasar desapercibido, pero no lo consiguió. El ex presidente, que sigue en proceso de investigación por parte del Magistrado Santiago Pedraz por los presuntos delitos de corrupción entre particulares, falsedad, administración desleal, apropiación indebida y posible alzamiento de bienes, fue detenido por la Guardia Civil hace ahora ya tres años y enviado, preventivamente, a la cárcel de Soto del Real junto a su hijo Gorka y al vicepresidente de la Federación y expresidente de la territorial tinerfeña, Juan Padrón. Los tres detenidos, que en su día salieron bajo fianza, están ahora a la espera de que Pedraz cierre la investigación.
Villar, que era el presidente de la RFEF cuando España ganó el Mundial en Sudáfrica y también el vicepresidente de la UEFA cuando se conquistaron las dos últimas Eurocopas, ha mantenido un perfil bajo durante los tres últimos años, desde que el 20 de julio de 2017 fuera esposado por los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Benemérita, que se lo llevaron de su casa, muy cerca de la plaza de toros de Las Ventas.
Precisamente desde su casa ha salido esta mañana Villar, que ha subido la callé Alcalá hasta llegar a Goya y enfilar por fin a Colón. No contaba con que el Pulpo, con tan buena intención como desconocimiento del personaje, le iba a recibir con alegría, ya que tal y como reza en su página web se trata de un animador "sinónimo de diversión, participación, energía y buen rollo en sus diferentes facetas". Villar le ha cortado el rollo: "Callaté, callaté", pero luego, ya más relajado, se ha hecho una foto con la Copa del Mundo y ha saludado a aficionados y federativos.