1x1 de la Real: la exhibición de Barrenetxea no merecía una derrota
Partidazo del canterano, enorme esfuerzo para empatar con goles de Merino y Oyarzabal, y castigo demasiado cruel con el 2-3 de Duarte al final.
Moyá: apenas tuvo trabajo, porque el Granada sólo tuvo tres ocasiones a las que sacó máxima rentabilidad. Vendido en los primeros goles, parece que se queda a media salida en el doloroso 2-3.
Aritz Elustondo: recuperó sensaciones con respeto a su partido contra el Levante con un partido más que correcto de lateral. Pudo marcar de cabeza antes del descanso. Acabó fundido.
Llorente: sigue apareciendo en la foto de los goles en contra, lamentablemente para él. A pesar de que haya dudas con que sí su toque de balón pueda ser generador de una nueva jugada y por tanto eso invalidaría el gol de Soldado, debe ser más contundente. Ese balón no tenía que haber pasado. Su mal despeje condicionó el resto de su partido. Bien a la hora de sacar jugado el balón.
Le Normand: no fue su mejor actuación. Todo lo que tiene de frialdad lo tiene de falta de jerarquía. Debe trabajar en ello para crecer como central, porque tiene madera de gran defensa. Por eso, Antonio Puertas le gana en el salto del 0-1 con el que empiezan los males de la Real.
Aihen Muñoz: partido muy exigente para el lateral navarro que intentó conectar con Barrenetxea y proyectarse en ataque. No estaba haciéndolo mal hasta que estropeó su actuación al no cerrar bien el remate de Duarte en el segundo palo que supone la derrota realista.
Zubimendi: otro buen partido del pivote del filial. Bien con el balón en la distribución, dando siempre un apoyo y jugando con criterio, bien colocado para robar el balón y dar equilibrio al equipo, especialmente cuando más complicado se puso el partido. Se le fue alto un disparo franco desde la frontal.
Merino: partido muy completo del navarro, que de nuevo se desfondó por el equipo, cubriendo una gran parte de la zona ancha y marcando el gol que permitía creer en el empate. Sigue jugándolo todo y no se resiente. Una máquina física. No tiene sustituto.
Oyarzabal: por dentro, por fuera... por donde sea siempre es fundamental para su equipo. Se echó al equipo a la espalda en el momento más crítico, buscando el empate, partiendo desde una banda o desde dentro. Jugó con criterio, tiró desmarques y estuvo en todas las peleas. Marcó un golazo en el empate momentáneo.
Portu: se acercó a su mejor versión, corriendo, centrando y llegando a posiciones de remate con dos ocasiones de gol que en otro momento de la temporada entraban fijo. Solo le falta un poco de finura en casa acción.
Barrenetxea: ¡Qué espectáculo! Antes del descanso ya amagó con enseñar de lo que es capaz con dos balones al palo, pero en la segunda parte literalmente se salió. Tiró de su amplio repertorio de regates para irse en el uno contra uno siempre. Soberbia actuación del donostiarra, demostrando que tiene una proyección fuera de lo común. Imanol acierta eacorándole a un costado para aprovechar su disparo a pierna cambiada.
Willian José: estuvo más asociativo que de costumbre, pero aún así sigue lejos de la mejor versión que le hemos visto. Incomprensible su fallo en el mano a mano enviando el balón muy lejos de la portería.
Gorosabel: intentó proyectarse por su banda desde que salió. No siempre le salió.
Djouahra: minutos muy valiosos con una gran jugada personal de la que salió el empate de Oyarzabal.