1x1 del Celta: Fran Beltrán fue decisivo en las dos áreas
El mediocentro regaló sin querer el balón a Morata en el gol del Atlético y luego empató con un golazo de volea. Debutó Villar por la lesión de Rubén.
Rubén Blanco: Apenas estuvo exigido durante el encuentro y en el gol encajado no pudo hacer nada. Su única intervención llegó en un cabezazo de Giménez que fue anulado por el árbitro. Se lesionó en el tramo final del partido tras golpear un balón en largo y, a falta de las pruebas médicas, parece difícil que pueda volver a jugar en lo que resta de LaLiga.
Hugo Mallo: Empezó algo dubitativo, pero acabó siendo el de antes de la lesión. Apenas concedió espacios por su costado y se prodigó de forma constante y con acierto por la banda derecha. Se entendió bien con Brais y Aspas para romper a la zaga rojiblanca a base de paredes.
Aidoo: Llega tarde a la marca de Correa en el tanto del Atlético a los 50 segundos. El golpe, lejos de descentrarle, le motivó para convertirse en insuperable. Probablemente sea el primer defensa que le gane la partida a Llorente tras el confinamiento. Aprovechó su velocidad para bloquear cualquier intento de ataque rojiblanco.
Murillo: Estuvo pendiente de ayudar a Jorge Sáenz, volviendo a ejercer de líder indiscutible de la zaga. Ganó todas las batallas aéreas, se encargó de los pases en largo desde atrás y apenas cometió errores. Vio la quinta amarilla por una falta a Morata y no podrá jugar el próximo sábado contra el Osasuna en El Sadar.
Olaza: Estuvo menos activo que de costumbre, más pendiente de la caída de Correa hacia su banda que de incorporarse al ataque. Los delanteros echaron de menos sus centros desde la izquierda, pues no tuvo opciones de poner balones al área ni siquiera a balón parado. El árbitro revisó una mano suya dentro del área que el Atlético pidió como penalti.
Okay: Se encargó de realizar la labor oscura en el centro del campo, sosteniendo al equipo con su buena posición táctica. Apretó en la presión, participó activamente en la circulación, retrasándose en ocasiones hasta el puesto de central para sacar el balón, e imponiendo su poderío aéreo en la faceta del juego por alto.
| Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
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Beltrán: Incansable durante todo el partido, agotó hasta el GPS para medir los kilómetros que recorrió. Fue protagonista en ambas áreas con dos acciones sin querer. En la primera le pone en bandeja el gol a Morata y en la segunda marca un golazo con una volea en semifallo que se va directamente a la escuadra, imparable para Oblak.
Brais: Tiró del carro celeste cuando más hacía falta. Realizó tres disparos peligrosos que asustaron al Atlético y asistió a Beltrán en el tanto del empate. Hizo circular el balón con criterio y estuvo muy activo durante la hora que estuvo sobre el terreno de juego. Torció el gesto cuando vio el número de su dorsal en la tablilla del cuarto árbitro para ser sustituido.
Aspas: La estrella celeste tocó más el balón fuera del área que dentro de la misma. La defensa del Atlético le llevó lejos de la portería de Oblak y el Celta notó esa ausencia de magia en los últimos metros. Combinó bien en tres cuartos de campo y dio una buena asistencia al espacio a Santi Mina para generar una ocasión de gol.
Smolov: El ruso no paró de pelearse con los defensas rojiblancos, pero nunca consiguió encontrar el hueco que le permitiese armar un disparo. Lo pudo hacer en un rechace de Oblak, pero tampoco en esa ocasión vio claro el espacio para buscar la portería. Acabó siendo sustituido a la hora de juego, frustrado por la falta de oportunidades para marcar.
Rafinha (entró por Brais): Salió en la última media hora para encontrar ese último pase que hiciera daño al Atlético, pero tuvo que encargarse más de las tareas defensivas y muchos balones tocados fueron en campo propio. Dejó los destellos propios de su enorme calidad y provocó alguna tarjeta amarilla.
Mina (entró por Smolov): Salió muy enchufando, realizando su primer disparo a los cinco minutos de entrar en el terreno de juego tras conectar con Aspas. Oblak despejó con dificultades. Más tarde lo volvió a probar con menos precisión, pero nunca descansó en la presión ni en tirar desmarques a la espalda de la zaga atlética.
Iván Villar (entró por Rubén Blanco): Su debut en Primera se produjo de forma inesperada por la lesión de Rubén, en un momento en el que el Atlético asediaba la portería celeste y con el conjunto vigués defendiendo un punto de oro. Pese a la presión, realizó una buena parada a tiro de Lemar que permite al Celta sumar un punto.
Bradaric (entró por Aspas): El croata jugó los siete minutos del descuento para cerrar los espacios en el centro del campo y ayudar a defender por acumulación el 1-1 obtenido hasta ese momento.