Joaquín salva virtualmente al Valladolid y mete en líos al Alavés
El jugador almeriense marcó en el 87, los blanquivioletas suman 39 puntos, mientras que el Alavés, con 35, sigue a seis del descenso, pero el puesto de Garitano corre peligro.
El Real Valladolid consiguió la victoria y, virtualmente, la salvación al vencer al Alavés en un partido poco vistoso, con escasas ocasiones que decidió Joaquín en los últimos minutos al aprovechar una indecisión de la zaga vitoriana. El almeriense ya estaba siendo el mejor tanto como central como cuando el técnico le pasó al mediocentro, pero con su gol se coronó como el héroe del partido. El conjunto vasco, por su parte, queda tocado, suma cinco derrotas consecutivas y permanece a seis puntos del descenso con su técnico Asier Garitano más discutido que nunca.
El resultado del Mallorca el sábado sumó para que Real Valladolid y Alavés salieran en la primera parte con el freno de mano echado y con la calculadora siempre en la cabeza. Y eso que los de Garitano, con muchos cambios y dejando a Joselu y Aleix Vidal en el banquillo, empezaron dominando. Edgar cabeceó fuera, como Duarte a la salida de un saque de esquina que se fue por poco. Se equilibró el duelo con los vallisoletanos empujando desde los costados, pero sin fortuna. Ni Hervías, ni Toni lograban desbordar, por lo que la sensación de peligro llegaba por las cabalgadas e insistencia de Miguel en la punta del ataque, aunque los blanquivioletas no dispararon una sola vez en los primeros 45 minutos.
Apretó el Real Valladolid en la segunda parte, llegando más a la portería de Roberto. Alcaraz puso un balón por encima del portero visitante que rozó el larguero y entró Unal que sólo necesitó un minuto para contar con la oportunidad más clara hasta ese momento. Waldo sirvió desde la izquierda y el turco se elevó para rematar de cabeza bien, abajo, pero Roberto respondió con una gran parada. Lo que debía ser gasolina para unos y otros tuvo el efecto contrario, dormidera en vena, con el balón en los pies de los defensas y escasos riesgos. El Rey del empate, el Real Valladolid, se encaminaba hacia su decimosexto partido que acababa en tablas cuando Olivas en un arranque de central forzó una falta en el lateral del área. Carnero la sirvió, la defensa vitoriana no fue capaz de despejar y Joaquín con un sutil toque embocó en un tanto que fue celebrado como el de la permanencia. Todavía Unal pudo ampliar la ventaja en el descuento, pero su tiro lo detuvo Roberto, antes de una tangana que puso final al partido.
De esta manera, el Real Valladolid aventaja en 10 puntos al Mallorca, más el golaverage, por lo que los pucelanos sólo bajarían perdiendo los cuatro partidos restantes y si los de Vicente Moreno ganan todo. El Alavés todavía aventaja en seis puntos a los mallorquines a falta de cuatro jornadas.
Sergio González
El entrenador del Real Valladolid, Sergio González, ha reconocido, tras ganar al Alavés, que los tres puntos logrados les van a permitir "crecer más" porque, el hecho de estar virtualmente salvados, "hará que se juegue con menos presión y con más atrevimiento".
"Ganar ha sido alegría muy grande, aunque no ha sido un partido bonito, ya que hemos salido los dos equipos atenazados, presionados, muy previsibles, con la idea de no cometer errores, lo que nos equilibró en el juego a ambos", señaló.
"En este caso, lo que el balón parado nos quitó en el anterior partido, nos lo ha devuelto en este", ha indicado el técnico catalán, quien ha aclarado que, aunque se ha dado "un paso de gigante" de cara a la permanencia, "hasta que la vaca no esté atada, hay que tratar de seguir sumando".
También ha recordado que nunca han hecho cábalas, sino que la meta era "alcanzar esos 40-41 puntos que dan la salvación, y en ese camino" están", ya que tenían claro que si hacían sus deberes "se lograría", de ahí que tuvieran esa idea totalmente "focalizada".
"Nuestra fortaleza es grupal, siempre lo he dicho, y se ha visto hoy. No hay ningún hombre de referencia, sino que existe una sinergia entre todos que nos hace ser más fuertes", ha matizado Sergio González, quien sobre todo está orgulloso de la "fortaleza mental" que han tenido sus jugadores.
Respecto a los cambios, manifestó: "El Alavés cambió el plan de desarrollo y propuso un partido para pillarnos en transiciones. En la primera parte hubo un exceso de responsabilidad, porque sabíamos que cualquier error podía ser determinante y quería buscar más profundidad y poder llegar al remate con esos cambios".
En su opinión, estos tres puntos supondrán para sus jugadores "una liberación que les va a hacer ser mejores, ser más atrevidos y sacar una mejor versión de cada uno para que el equipo crezca más aun", y por eso el objetivo es "ir a Valencia a hacer un gran partido y, por qué no, lograr algo positivo".
Por último, se ha mostrado "orgulloso" de la actitud de todos sus futbolistas durante el confinamiento y el posterior regreso "porque el fin era minimizar errores, ya que cualquier detalle o acción aislada iba a tener trascendencia, y su respuesta ha sido increíble, al igual que su nivel físico".
"Además, les dijimos que todos tenían un nivel muy parejo y que no había equipos A o B, sino que todos iban a tener su parte de protagonismo. Hemos cumplido con ello y ellos lo han ejecutado de manera magistral para hacer que el objetivo esté ya muy cerca", ha subrayado.
Garitano
El técnico del Alavés, Aitor Garitano, señaló, tras caer derrotado ante el Real Valladolid, que los jugadores "han tenido buena actitud desde el principio, tanto los de dentro como los del banquillo" y que aún dependen de ellos mismos para conseguir la salvación.
Según ha explicado, "el partido no era fácil, ni el escenario, ante un rival que también se jugaba mucho, con una temperatura alta, y a los jugadores no se les puede reprochar nada, porque han estado bien y el partido se ha ido al final, cuando ya pensábamos que podíamos lograr un punto que cortara la mala racha".
"No ha podido ser. Las derrotas hacen daño, pero seguimos dependiendo de nosotros y seguiremos así hasta el último día, trabajando y buscando lo mejor de cada uno", ha añadido.
Garitano ha insistido en que "hay que estar confiado en que se conseguirá la permanencia, porque la liga es complicada, pero lo más importante es que dependemos de nosotros y, aunque anímicamente esta racha influye, vamos a seguir al máximo hasta la última jornada".
Preguntado por si creía que el Mallorca iba a ser capaz de sumar siete puntos, ha advertido de que "más que mirar al rival hay que mirarse a uno mismo" y, en este sentido, ha comentado que el equipo "depende de los jugadores, de la actitud de todos, de seguir creyendo". "Somos conscientes de que el camino está siendo difícil, pero el objetivo es seguir mejorando individualmente y como equipo y pelear hasta el último minuto", ha concluido.