El Almería tampoco gana sin Guti
Vicandi Garrido fue el principal protagonista. No tuvo su tarde. Dejó al Mirandés en inferioridad, pero aún así los rojillos fueron capaces de empatar en la última jugada.
Reparto de puntos entre Mirandés y Almería en Anduva en un partido en el que los andaluces desaprovecharon la ocasión de situarse más cerca del ascenso directo. Merquelanz salvó un punto para los locales en el añadido al transformar un penalti (2-2). El partido no pudo comenzar de peor manera para los intereses rojillos. En una acción sin aparente peligro y con todo a favor, Darwin Núñez le comió la tostada a Carlos Julio, improvisado central en el bando local, para servir en bandeja el gol a Vada (0-1). Trataron de reaccionar los pupilos de Iraola. Tras una acción por banda de Marcos André, el venezolano González puso a prueba a Fernando que atrapó el cuero en dos tiempos.
El Almería estuvo muy cerca del segundo en una cabalgada de Darwin Núñez que se escapó en velocidad del central Sagnan. El jugador charrúa quebró a Lizoain en su salida, pero Carlos Julio se desquitó de su error en el primer tanto al despejar la pelota bajo la misma línea. Del posible 0-2 se pasó al empate a uno. Merquelanz encontró a Guridi en el interior del área y el centrocampista guipuzcoano no perdonó para batir a Fernando (1-1). El choque tenía ritmo. Los andaluces pudieron ponerse otra vez en ventaja con un testarazo a bocajarro de Darwin Núñez que Lizoain salvó con una meritoria intervención.
La velocidad del delantero visitante puso en jaque a la zaga mirandesista. Nadie era capaz de frenar sus avances. Darwin Núñez se plantó solo delante del marco rival tras recibir el medido pase de Villalba, pero cruzó en exceso su disparo para alivio del portero canario. Sufrió mucho en defensa el equipo rojillo en cada ataque almeriense. En el añadido del primer acto llegó la segunda diana andaluza. Villalba encontró a Corpas que, con un potente remate cruzado, batió el marco local (1-2).
Quemó sus naves el técnico local Andoni Iraola en busca de la remontada, dando entrada a Crisetig e Íñigo Vicente. El Mirandés buscó la igualada, pero al cuadro local le costaba generar ocasiones de verdadero peligro pese a merodear al área almeriense. Una nueva expulsión, esta vez de Antonio Sánchez que vio dos amarillas en la misma acción, dieron al traste con las posibles esperanzas de al menos lograr el empate. Diferente rasero el del colegiado Vicandi Garrido que ni siquiera amonestó a Balliu tras pegar un pelotazo al cuero en señal de protesta.
Pese a encontrarse en inferioridad, el Mirandés tuvo fe y al final obtuvo premio en el tiempo añadido. David Costas derribó a Barco en el área y el árbitro señaló el punto fatídico. Se demoró varios minutos el lanzamiento. Sin embargo, a Merquelanz no le tembló el pulso para alojar el balón en el fondo del marco (2-2). No hubo tiempo para más. El cuadro rojillo se acerca aún más a la permanencia, mientras que el Almería desaprovecha la oportunidad de meter presión a Cádiz y Zaragoza en la lucha por el ascenso directo.