Las expulsiones lastran diez de las trece jornadas de Abelardo
El Espanyol ha acabado con uno menos en cinco de sus seis salidas -Vila-Real, Sevilla, Valladolid, Pamplona y Getafe-, lo que ha repercutido en las jornadas siguientes.
“ESCANDALOSAMENTE (en mayúsculas) orgulloso de mi equipo”, escribía Bernardo Espinosa en las redes sociales al acabar el Getafe-Espanyol, con todo el doble sentido posible. Por la formidable actuación de sus compañeros tras su propia expulsión, y por lo injusta que ésta resultó, ya que José Luis Munuera Montero –y lo que es peor, el VAR– interpretó como una agresión un lance en el que la mano del colombiano toca la cara de Damián Suárez.
Lo más preocupante para el conjunto de Abelardo Fernández es que no se trata, ni mucho menos, de la primera vez. “Nos están perjudicando las expulsiones, la verdad. No sé, pero las del Espanyol siempre son rojas”, lamentó Jonathan Calleri. Y razón no le falta. Los pericos han acabado con un jugador menos en cinco de sus seis últimas salidas en LaLiga. Tantas como lleva el actual técnico. Desde el lejano 19 de enero, la visita a Granada es la única que no se ha saldado con una expulsión. Un dato que resulta cuando menos curioso.
Y lo es porque casi siempre se ha producido alguna tarjeta dudosa. La primera de las sanciones la sufrió Javi López, ante el Villarreal, con una doble amarilla: la primera fue más que discutible, ya que señaló el árbitro mano y penalti cuando el balón anteriormente había impactado en su cuerpo. Unas semanas después, en el Sánchez Pizjuán, Víctor Sánchez veía la segunda amonestación por cortar un contraataque del sevillista Youssef En-Nesyri cuando su intención era la de retirar el pie.
En la siguiente salida, en Valladolid, recibía muy pronto David López una primera tarjeta por mover su mano hacia atrás, fortuitamente, sin intención de tocar a ningún adversario. Y en el último encuentro antes del obligado parón, en Pamplona, era Diego López el expulsado, tras ver una segunda amarilla por tocar el balón con la mano fuera del área. Estaba tan poco claro en las imágenes que llegó el club a presentar alegaciones al Comité de Competición, aunque sin éxito alguno.
Casualidad o no, en esas cinco salidas ha acabado sumando el Espanyol cinco puntos sobre 15 posibles, ya que sí ganó pese a las adversidades ante el Villarreal, en la primera victoria de Abelardo, y empataron contra Sevilla y Getafe, pero acabó perdiendo frente a Valladolid y Osasuna. Y ni decir tiene que esas expulsiones habrán lastrado al equipo para los siguientes partidos: salvo que prospere el recurso ante el Comité de Apelación, Bernardo no podrá jugar ante el Levante ni contra el Betis, con lo Abelardo habrá estado lastrado por una sanción en diez de sus 13 jornadas al frente del Espanyol.