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Espanyol

¿Qué fue de los protagonistas del Tamudazo?

Aunque esa noche recibió dos goles, al camerunés, que se consagró en el Espanyol como ‘parapenaltis’ en LaLiga 2004-05, se le daba especialmente bien el Camp Nou. Una querencia que se extendió más adelante como portero del Málaga. Tras su paso por el Fenerbahçe, contactó el pasado verano con el club perico para regresar, pero la propuesta no llegó a buen puerto.
Llegó al Espanyol esa temporada tras una década en el Athletic Club, y no solo participó del Tamudazo sino también de la Copa UEFA, entre otras cosas con un gol en las semifinales ante el Werder Bremen. Tras retirarse en el Real Unión de Irún, fundador de LaLiga junto a los pericos, trabaja en la agencia de representación Global Ases.
El eterno capitán del Espanyol tenía 24 años el día del Tamudazo. Y ya estaba completamente afianzado en LaLiga, muestra de ello era su titularidad en el derbi, la séptima que acumulaba. Antes de su abrupta y tristísima desaparición, pudo conseguir una victoria en el Camp Nou, el 21 de febrero de 2009.
Situado en el carril izquierdo esa noche debido a las bajas, el lateral diestro era todo potencia. Y pundonor. Formado entre el Martinenc y el Espanyol, recalaría después en el Betis, y tras pasar por Llagostera y Fundación Gramenet se retiró. Hoy es el técnico asistente del Juvenil B del Espanyol.
Y el primer entrenador de ese Juvenil no es otro que Moisés. Se quitó con el Tamudazo parte de la espinita que traía de la final de la Copa UEFA, donde había sido expulsado con doble amarilla. En este encuentro en el Camp Nou jugó hasta el minuto 60. Olympiacos, Granada y Girona fueron algunas de las aventuras de este periodista antes de meterse de lleno en los banquillos.
Uno de los emblemas de aquel Espanyol, junto al propio Tamudo y De la Peña, autor también de un gol en la Copa del año anterior, caló entre la afición también por sus sentencias fuera de los terrenos de juego, como “lo mejor de Barcelona es ser del Espanyol”. Técnico de la Damm, de División de Honor juvenil, desde hace un año, no esconde que su sueño de futuro sería dirigir al conjunto perico.
A pesar de asistir a Tamudo en el primer gol, su gran día en el Camp Nou como jugador del Espanyol llegaría dos temporadas más tarde, en el Delapeñazo que protagonizó con dos goles y un triunfo que a la postre sería valiosísimo para que el Espanyol se salvase. ‘Lo Pelat’, un genio del esférico, se retiró en 2011 para formar una agencia de representantes junto a uno de sus rivales en el Tamudazo: Carlos Puyol.
Canterano blanquiazul y fijo en la Selección Sub-21, sus mejores temporadas en el primer equipo fueron esa (pese al mal recuerdo en la tanda de penaltis de Glasgow) y la siguiente. Además de centenario en LaLiga, se convirtió en un clásico en Alemania, donde su última aventura data de la pasada temporada: el histórico ascenso a la Bundesliga con el Union Berlin.
Le incomodaba que le llamaran revulsivo, pero entrando desde el banquillo había logrado dos de sus grandes hitos en el Espanyol: un gol en la final de la Copa del Rey de 2006 y el de la salvación, un mes después. En el Tamudazo sería sustituido en el minuto 63. Sigue teniendo el gol por bandera: es el máximo realizador histórico del Goa FC, en la Superliga india. Ahora está precisamente decidiendo su futuro.
Con un currículum enorme, ya que ha pasado por Liverpool, Manchester City, Girondins de Burdeos o Galatasaray, su rendimiento en el Espanyol tuvo dientes de sierra. Aquella noche tuvo que ser sustituido en el 41’ por lesión. Espectacular fue su primera vuelta en la temporada siguiente, 2007-08. Hoy vive en Rusia, donde también jugó, colaborando en diferentes academias de fútbol.
Del héroe del Tamudazo poco se puede decir ya que no se sepa. Como que aquel día se convirtió en el máximo goleador del Espanyol en la historia de LaLiga. Que acabó marcando 129 dianas en el club perico, donde también es quien más partidos ha disputado: 340. Que anotó en las dos finales de la Copa en que jugó, 2000 y 2006, y que ambas las ganó. Y que es el único futbolista que ha marcado en los estadios de Sarrià, Montjuïc y Cornellà. Y que hoy se desempeña como adjunto en la dirección deportiva perica.
En esa dirección deportiva el líder es precisamente Rufete, como director de fútbol profesional. Y, curiosamente, le dio la asistencia a Tamudo en ese 2-2 del 9 de junio de 2007, en que entró por el lastimado Riera. Formado en el Barcelona, dejó huella no solo en el Espanyol, al que ha regresado, sino también en el Valencia, donde igualmente trabajó como mánager general deportivo. Y también ejerció como entrenador, hasta hace dos años, en el Ibiza.
Debutaba ese curso el canterano con el primer equipo, a sus 21 años, y de pronto se vio en las semifinales europeas ante el Werder Bremen, contra el Atlético y en el Bernabéu. El mediocentro, sustituto natural esa velada de Moisés Hurtado en el 60’, dos años más tarde viviría sus últimos minutos como perico en el Delapeñazo, en el Camp Nou, donde le lesionaron. Dejó su sello en el Rayo Vallecano, el Girona, Blackpool, Millwall, Chesterfield y en el Sabadell, donde continúa con su carisma. Incluso hizo una incursión en la política local de Girona.
Tiene para una novela el atacante brasileño, firmado el verano anterior y que maravilló ante el Benfica, en los cuartos de la Copa UEFA, y también con su golazo en la final. En el Tamudazo entró por Coro. De carácter reservado, no solo sufrió problemas de adaptación sino sobre todo el secuestro de su padre. Así que, sin poder desplegar todo su enorme talento natural, se acabó marchando en 2009 al Flamengo. En Brasil jugó con intermitencia hasta su retirada. El banquillo del Espanyol en el Tamudazo lo completaban Juan Velasco, Antonio Álvarez ‘Ito’ y Julián López de Lerma
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Kameni

Aunque esa noche recibió dos goles, al camerunés, que se consagró en el Espanyol como ‘parapenaltis’ en LaLiga 2004-05, se le daba especialmente bien el Camp Nou. Una querencia que se extendió más adelante como portero del Málaga. Tras su paso por el Fenerbahçe, contactó el pasado verano con el club perico para regresar, pero la propuesta no llegó a buen puerto.

Foto:Anadolu AgencyGetty Images

Lacruz

Llegó al Espanyol esa temporada tras una década en el Athletic Club, y no solo participó del Tamudazo sino también de la Copa UEFA, entre otras cosas con un gol en las semifinales ante el Werder Bremen. Tras retirarse en el Real Unión de Irún, fundador de LaLiga junto a los pericos, trabaja en la agencia de representación Global Ases.

Dani Jarque

El eterno capitán del Espanyol tenía 24 años el día del Tamudazo. Y ya estaba completamente afianzado en LaLiga, muestra de ello era su titularidad en el derbi, la séptima que acumulaba. Antes de su abrupta y tristísima desaparición, pudo conseguir una victoria en el Camp Nou, el 21 de febrero de 2009.

Foto:GORKA LEIZADIARIO AS

Javi Chica

Situado en el carril izquierdo esa noche debido a las bajas, el lateral diestro era todo potencia. Y pundonor. Formado entre el Martinenc y el Espanyol, recalaría después en el Betis, y tras pasar por Llagostera y Fundación Gramenet se retiró. Hoy es el técnico asistente del Juvenil B del Espanyol.

Foto:Gorka LeizaDiario as

Moisés Hurtado

Y el primer entrenador de ese Juvenil no es otro que Moisés. Se quitó con el Tamudazo parte de la espinita que traía de la final de la Copa UEFA, donde había sido expulsado con doble amarilla. En este encuentro en el Camp Nou jugó hasta el minuto 60. Olympiacos, Granada y Girona fueron algunas de las aventuras de este periodista antes de meterse de lleno en los banquillos.

Foto:FERNANDO ZUERASDiario as

Luis García

Uno de los emblemas de aquel Espanyol, junto al propio Tamudo y De la Peña, autor también de un gol en la Copa del año anterior, caló entre la afición también por sus sentencias fuera de los terrenos de juego, como “lo mejor de Barcelona es ser del Espanyol”. Técnico de la Damm, de División de Honor juvenil, desde hace un año, no esconde que su sueño de futuro sería dirigir al conjunto perico.

Foto:Gorka LeizaDIARIO AS

De la Peña

A pesar de asistir a Tamudo en el primer gol, su gran día en el Camp Nou como jugador del Espanyol llegaría dos temporadas más tarde, en el Delapeñazo que protagonizó con dos goles y un triunfo que a la postre sería valiosísimo para que el Espanyol se salvase. ‘Lo Pelat’, un genio del esférico, se retiró en 2011 para formar una agencia de representantes junto a uno de sus rivales en el Tamudazo: Carlos Puyol.

Foto:GONZALEZ IRANZODIARIO AS

Torrejón

Canterano blanquiazul y fijo en la Selección Sub-21, sus mejores temporadas en el primer equipo fueron esa (pese al mal recuerdo en la tanda de penaltis de Glasgow) y la siguiente. Además de centenario en LaLiga, se convirtió en un clásico en Alemania, donde su última aventura data de la pasada temporada: el histórico ascenso a la Bundesliga con el Union Berlin.

Foto:Jan-Philipp BurmannCity-Press via Getty Images

Coro

Le incomodaba que le llamaran revulsivo, pero entrando desde el banquillo había logrado dos de sus grandes hitos en el Espanyol: un gol en la final de la Copa del Rey de 2006 y el de la salvación, un mes después. En el Tamudazo sería sustituido en el minuto 63. Sigue teniendo el gol por bandera: es el máximo realizador histórico del Goa FC, en la Superliga india. Ahora está precisamente decidiendo su futuro.

Riera

Con un currículum enorme, ya que ha pasado por Liverpool, Manchester City, Girondins de Burdeos o Galatasaray, su rendimiento en el Espanyol tuvo dientes de sierra. Aquella noche tuvo que ser sustituido en el 41’ por lesión. Espectacular fue su primera vuelta en la temporada siguiente, 2007-08. Hoy vive en Rusia, donde también jugó, colaborando en diferentes academias de fútbol.

Tamudo

Del héroe del Tamudazo poco se puede decir ya que no se sepa. Como que aquel día se convirtió en el máximo goleador del Espanyol en la historia de LaLiga. Que acabó marcando 129 dianas en el club perico, donde también es quien más partidos ha disputado: 340. Que anotó en las dos finales de la Copa en que jugó, 2000 y 2006, y que ambas las ganó. Y que es el único futbolista que ha marcado en los estadios de Sarrià, Montjuïc y Cornellà. Y que hoy se desempeña como adjunto en la dirección deportiva perica.

Foto:RODOLFO MOLINADiario as

Rufete

En esa dirección deportiva el líder es precisamente Rufete, como director de fútbol profesional. Y, curiosamente, le dio la asistencia a Tamudo en ese 2-2 del 9 de junio de 2007, en que entró por el lastimado Riera. Formado en el Barcelona, dejó huella no solo en el Espanyol, al que ha regresado, sino también en el Valencia, donde igualmente trabajó como mánager general deportivo. Y también ejerció como entrenador, hasta hace dos años, en el Ibiza.

Foto:Gorka LeizaDiario as

Ángel

Debutaba ese curso el canterano con el primer equipo, a sus 21 años, y de pronto se vio en las semifinales europeas ante el Werder Bremen, contra el Atlético y en el Bernabéu. El mediocentro, sustituto natural esa velada de Moisés Hurtado en el 60’, dos años más tarde viviría sus últimos minutos como perico en el Delapeñazo, en el Camp Nou, donde le lesionaron. Dejó su sello en el Rayo Vallecano, el Girona, Blackpool, Millwall, Chesterfield y en el Sabadell, donde continúa con su carisma. Incluso hizo una incursión en la política local de Girona.

Foto:FITO GONZALEZDiario as

Jónatas

Tiene para una novela el atacante brasileño, firmado el verano anterior y que maravilló ante el Benfica, en los cuartos de la Copa UEFA, y también con su golazo en la final. En el Tamudazo entró por Coro. De carácter reservado, no solo sufrió problemas de adaptación sino sobre todo el secuestro de su padre. Así que, sin poder desplegar todo su enorme talento natural, se acabó marchando en 2009 al Flamengo. En Brasil jugó con intermitencia hasta su retirada. El banquillo del Espanyol en el Tamudazo lo completaban Juan Velasco, Antonio Álvarez ‘Ito’ y Julián López de Lerma

Foto:DIARIO ASDiario as

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