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ATLÉTICO

"Mi padre cogió el coronavirus por culpa del Liverpool-Atleti"

La esposa y el hijo de de un hombre fallecido en Liverpool por coronavirus, Richard Mawson, piden responsabilidades al Gobierno en el 'Daily Mail'.

MadridActualizado a
"Mi padre cogió el coronavirus por culpa del Liverpool-Atleti"

Si la semana pasada un informe cifraba en 41 personas las personas fallecidas en Liverpool a causa del Liverpool-Atlético por coronavirus, hoy el Daily Mail le pone a ese número nombres y apellidos. Los de Richard Mawson. Su viuda y su hijo piden explicaciones al Gobierno británico por su muerte a causa de esta enfermedad porque, para ellos, el contagio tiene fecha y sitio: Anfield, 11 de marzo. 

"Mi padre cogió el coronavirus por culpa del Liverpool-Atleti"

"Obviamente, el coronavirus ya se estaba propagando en el país, pero cuando el Gobierno toma una posición y dice que todo está bien y que se puede ir... Para el aficionado es pasión, lo sigue de hace tiempo, y haces lo que el Gobierno te dice. Según el Gobierno, todo estaba bien, pero la semana siguiente decidieron establecer la contención", confesaba su viuda en el Daily Mail. Su hijo, Jamie, va más allá con un porcentaje: "Teniendo en cuenta cuándo desarrolló los síntomas, cuándo enfermó realmente y cuándo murió, estoy al 99% seguro de que lo cogió en el partido".

Duras críticas en contra de la celebración del partido con público

Lo cierto es que el Liverpool-Atlético ha estado en la mira desde el día que se jugó. Mientras otros partidos de esa vuelta de octavos de Champions se disputaron a puerta cerrada (Valencia-Atalanta), ya por la propagación de la enfermedad por toda Europa, las puertas abiertas y el permiso para que la afición entrase a este partido en Anfield, y el permiso para que 3.000 aficionados viajasen desde España, que declararía el estado de alarma tan sólo tres días más tarde, es una decisión duramente criticada desde Madrid (el alcalde Martínez Almeida) y el propio Liverpool (director de salud, autoridades, estudios...). Todos siempre con el mismo pensamiento velado entre los dientes. "No se debió permitir".