El 'New York Times' también se rinde a la filosofía del Athletic
Pone al club como modelo para la era postcoronavirus. "La felicidad no es solo ganar. A veces, el éxito puede ser simplemente tener un equipo que sea de un lugar", expone el rotativo.
El Athletic es un club que traspasa fronteras, de impacto mundial. El New York Times dedicaba hace unos días un reportaje a Aduriz y hoy ha redundado en las singularidades de la filosofía de la entidad. "Un equipo de barrio que se enfrenta al mundo", expone parafraseando al delantero recién retirado "Un club en el que los jugadores comparten perspectiva, en el que la línea entre el equipo y su público está borrosa hasta el punto de la invisibilidad, un equipo que pertenece a un lugar en un deporte que no conoce fronteras", sostiene el autor, el redactor jefe de fútbol del NYT, Rory Smith.
El rotativo estadounidense pone la ideas bilbaína como un modelo a seguir cuando se acabe la pandemia, por las estrecheces que tendrán que soportar los clubes. "Ahora puede ser un camino útil para otros", destaca. y también constata que las raíces de esa identidad están bien documentadas. "El Athletic es el equipo atípico en el fútbol de élite que se niega a aprovechar la globalización que ha transformado el juego, principalmente para bien, ocasionalmente para mal, en las últimas dos décadas más o menos; se adhiere a una política estricta de presentar solo jugadores nacidos o criados en las regiones vascas de España y Francia", agrega.
Deja claro el periódico que esa elección conlleva una desventaja competitiva, porque "los rivales pueden reclutar jugadores de todo el mundo y el Athletic depende de su propia academia y de su capacidad para sacar jugadores de un puñado de otros equipos de la región: Real Sociedad en San Sebastián, Osasuna en Pamplona y, en los últimos años, Eibar".
Además, el NYT puntualiza que los jugadores nacidos fuera pueden encontrar puntos de conexión, como Lizarazu, un vasco-francés y Ganea, natural de Rumanía. "Sin embargo, no todos esos jugadores cumplen con los criterios. Según los informes, el club sintió que Marcos Asensio no cumplía con los requisitos y rechazó la oportunidad de ponerlo en sus filas cuando era adolescente. Ahora juega para el Real Madrid", relata.
La final de la Copa del Rey es un hito destacado al otro lado del Atlántico. Los elogios a Aduriz no cesan. "Quería retirarse allí, para 'cerrar el círculo', como expresó, en el club de su corazón". "Hay momentos críticos, de desacuerdo, pero escrito en el contrato tácito entre el Athletic y sus seguidores está la aceptación tácita de que habrá años de sequía. Habrá momentos en que los trofeos son una aspiración lejana, y lo mejor que se puede esperar es una sola noche de euforia contra uno de los gigantes de LaLiga". Pero concluye que el modelo Athletic no es como una franquicia que pueda adquirirse fácilmente. "La felicidad no es solo ganar. A veces, el éxito puede ser simplemente tener un equipo que sea de un lugar y que tenga que conquistar el mundo", remata el redactor.