Pedro Porro: "No se puede comer toda la tarta en un día, hay que ir poco a poco"
El lateral analizó el regreso al trabajo y habló de la progresión en la carga que les permitirá estar al máximo nivel para jugar ante el Leganés.
El Real Valladolid regresó a los entrenamientos y sus jugadores preparan el inicio de lo que resta de Liga cumpliendo plazos y nuevas normas. Pedro Porro habló a través del departamento de prensa del club de este contacto con el césped: "Da alegría volver, aunque se a distancia de los compañeros y con estas medidas de seguridad. Da gusto volver a correr sobre el césped que es donde nos gusta estar, pero ha sido un poco duro porque correr por asfalto como ya se pudo hacer la semana pasada o entrenar en casa, no es lo mismo. Aquí es diferente, se trabaja con otra alegría porque ya sabes que entre comillas, está más cerca la posibilidad de volver a competir".
Como a cualquiera, a Porro se le ha hecho largo este tiempo y ansiaba este regreso: "Se me olvidaron las botas en el estadio y no he podido usarlas en el césped de casa, pero he trabajado con zapatillas normales. Ha sido curioso volver a dar al balón, no me salía ni un pase (sonríe). Lo he echado mucho de menos y ahora poco a poco vamos cogiendo ritmo".
Esta nueva normalidad requiere una estricta observación de las normas y en el caso de los futbolistas, el protocolo impuesto por la liga es aun más estricto: "Todos queremos estar como antes, haciendo bromas, cerca de nuestros compañeros, pero toca mantener las distancias... incluso con la familia con la que convives. Echo mucho de menos pasar buenos ratos en el vestuario y espero que podamos recuperarlo pronto porque es lo que más une al equipo".
Pedro Porro fue el representante del Real Valladolid en el torneo de fútbol virtual de hace algunas semanas y recuerda que "jugué dos torneos con fines solidarios, para recaudar fondos en la lucha contra el coronavirus. Me apunté a todo aquello en lo que pude ayudar porque es bueno para todos y además me lo pasé muy bien".
Deportistas de élite encerrados, sin poder entrenar y ahora regresando al trabajo con la incertidumbre de lo que puede pasar y de cómo se podrá jugar: "Hay que estar preparados mentalmente, la cabeza es lo que nos lleva adelante y se trata de decirte a ti mismo: me voy a aislar de esto, me voy a centrar en cada semana y prepararme para la competición de la mejor manera posible".
Esos once partidos en tan poco tiempo, con la dificultad de recuperar la forma y con la exigencia de la competición hará que todos los jugadores tengan más importancia incluso que antes: "El míster ya sabe que yo estoy preparado, y cuando me dé la oportunidad intentaré dar el máximo, así lo he demostrado y lo voy a seguir haciendo. Si quiere tirar de mí, yo voy a estar preparado; voy a responder igual que hará el resto de mis compañeros. Habrá partido cada tres días y habrá opciones para todos. Estamos preparados y tenemos confianza en los compañeros".
Como decía Porro, los objetivos son claros: "Aprovechar cada entrenamiento e intentar prepararme bien después de dos meses parados. El trabajo es exigente, pero ya nos han dicho los técnicos que tranquilidad, que la tarta no se come entera en un día, que vayamos poco a poco. Creo que vamos a llegar bien al primer partido porque cuando paramos veníamos de una derrota, un resultado muy abultado que no reflejaba el trabajo que se hizo en el campo; el equipo está bien y tiene la felicidad de volver a estar aquí y aunque sea a distancia eso se nota. Vamos a llegar a la competición al máximo posible y encima ante un rival directo e intentaremos lograr los tres puntos".