Once leyendas del Real Valladolid por dorsales
¿Quién es el mejor jugador del Valladolid que llevó el número 7?, ¿y el 9? Éstos son los históricos futbolistas que portaron los dorsales del 1 al 11.
1.- Fenoy
El portero argentino llegó a Real Valladolid desde el Celta para hacer historia en sus ocho temporadas como blanquivioleta (1980-88) siendo el portero del único título blanquivioleta, la Copa de la Liga en 1984. Jugó 252 encuentros con los vallisoletanos en Primera y destacó por sus sensacionales estiradas y sus salidas sin miedo. Se retiró del fútbol en Zorrilla.
2.- Torres Gómez
Lateral derecho cumplidor en ataque y defensa, con potencia. Llegó del Real Madrid e hizo el resto de su carrera en la banda de Zorrilla. Llegó en la campaña 1993-94 y estuvo 12 temporadas como blanquivioleta, todas ellas en Primera, menos la última en Segunda. Jugó 328 partidos en total (27.570 minutos) siendo el cuarto jugador con más encuentros con la camiseta del Real Valladolid.
3.- Alberto Marcos
El jugador con más minutos (37.648) y más partidos (438) como blanquivioleta. Lateral zurdo, todo garra, dueño de su banda y jefe del vestuario, llegó en la campaña 1995-96 y se mantuvo durante 15 temporadas (12 en Primera) contando con dos descensos y un ascenso. Su último año de profesional lo jugó en Huesca.
4.- Gilberto Yearwood
Central hondureño elegante, con calidad y que ejercía de líder. Llegó del Elche y tras tres temporadas (1980-83) se fue al Tenerife después de haber acumulado 64 encuentros con la blanquivioleta, todas ellas en Primera División. Es considerado el mejor jugador hondureño de todos los tiempos.
5.- Fernando Hierro
Mediocentro reconvertido en central, llegó al Promesas del Valladolid, coincidió con su hermano Manolo y enseguida Vicente Cantatore le subió al primer equipo en la temporada 1987-88 donde permaneció dos temporadas antes de firmar por el Real Madrid. Precisamente ante el equipo merengue jugó su último partido como blanquivioleta en la final de la Copa del Rey del 89. Disputó 68 partidos como blanquivioleta.
6.- Edu Manga
Brasileño de una calidad sensacional, era mediocentro zurdo y es elegido por muchos aficionados del Real Valladolid como uno de los mejores que vistió la blanquivioleta pese a que sólo disputó 50 partidos entre las temporadas 1996-98. Su buena colocación, calidad y variedad de recursos, donde destacaban las rabonas, le hicieron muy popular.
7.- Pato Yáñez
El chileno fue contratado tras el Mundial de España y en el equipo vallisoletano jugó cuatro temporadas, en las que disputó 109 partidos, anotando 14 goles. Llegó en la campaña 1982-83 y participó de la consecución de la Copa de la Liga en la siguiente temporada. Su velocidad y calidad por la banda derecha todavía se recuerda en Zorrilla.
8.- Caminero
Empezó como centrocampista y acabó como central gracias a su calidad inigualable. Llegó en 1989 como contraprestación del Real Madrid por el fichaje de Hierro, permaneció cuatro temporadas antes de firmar por el Atlético y volvió cinco temporadas después para completar la decena de campañas como pucelano, nueve de ellas en Primera. Disputó 289 partidos y 21.435 minutos, siendo el octavo en la clasificación histórica blanquivioleta.
9.- Polilla Da Silva
El uruguayo militó tres temporadas en el Real Valladolid haciendo pareja con Pato Yáñez las temporadas 1982-85. En la segunda, 1983-84 fue partícipe de la consecución del único título blanquivioleta, la Copa de la Liga, y además consiguió el trofeo de máximo goleador de Primera, con 17 tantos.
10.- Eusebio
Mediocentro y canterano con una calidad sensacional y un talento fantástico para jugar el balón. Como muchos otros empezó y acabó su carrera de blanquivioleta. Jugó en el Pucela nueve temporadas, empezando en la 1983-84, con la consecución de la Copa de la Liga, estuvo cuatro campañas antes de salir al Atlético de Madrid y volvió en la 1997-98, cinco temporadas más, para acabar su carrera en Zorrilla.
11.- Víctor
El quinto jugador con más minutos (22.600) en la historia blanquivioleta también llegó del Real Madrid y en dos etapas se ganó un espacio en el once ideal del Pucela en 302 partidos en nueve campañas. Su tremenda calidad y una pierna izquierda prodigiosa le ayudaron a marcar 90 goles, siendo el máximo goleador del club.
