El regreso de LaLiga siembra la discordia dentro de las plantillas
Debate entre compañeros en los medios: Cala contradice a Fali, Joan Jordán a Suso, y Gayá, uno de los primeros infectados, piensa muy diferente a Gabriel Paulista.
LaLiga se encuentra a punto de entrar en la primera de las semanas que testarán la vuelta del fútbol, la de las pruebas del Covid-19 y el comienzo de los entrenamientos (individuales o por parejas, todavía) en las ciudades deportivas. No hace falta siquiera conocer los chats de los equipos, o las conversaciones entre jugadores, para saber que hay plantillas absolutamente divididas ante este regreso. La batalla de declaraciones, antagónicas en muchos casos, deja claro que la controversia está servida.
El ejemplo más curioso lo han protagonizado dos cadistas, Fali y Juan Cala, que han jugado juntos en el centro de la zaga amarilla durante una veintena de partidos esta temporada pero piensan de manera diametralmente opuesta. "Me dicen loco pero no jugaré; la vida vale más que el dinero", dijo Fali a As hace menos de dos semanas. "Tenemos que jugar, aunque haya un poco de riesgo", le contradice Cala. Compartir defensa no debe de parecerse a compartir colchón.
130 kilómetros al norte, en Sevilla, también hay contrastes. Suso, recién llegado a Nervión en el mercado de invierno, ha insistido en sus reticencias: "Yo creo que no volveremos a jugar. En Francia se ha cancelado", afirma el gaditano mientras el catalán Joan Jordán apuesta por un regreso más pronto que tarde: "Mi madre, que limpia, tiene riesgo. Yo quiero terminar la competición, me gustaría volver a esa otra normalidad porque es beneficioso para todos, más allá del aspecto deportivo y el económico".
Uno de los equipos afectados por la pandemia, con varios futbolistas infectados, fue el Valencia. Peor incluso así, en el club ché hay sentimientos encontrados. "No quiero que por precipitarnos o tener una presión económica pueda morir alguien. ¡Antes la vida y después el fútbol", expresó con rotundidad y sin ocultar su miedo el defensa brasileño Gabriel Paulista. José Luis Gayà, a pesar de haber sido uno de los primeros diagnosticados con la enfermedad, no se muestra tan tajante: "Hay que evitar que todo esto se expanda y los mayores riesgos. Pero yo pienso que lo más justo para todos es que se acabe LaLiga".