La prueba piloto del 'naming rights' en el Camp Nou
Además de la causa benéfica, la propuesta de poner apellido en el Camp Nou servirá como tasación aproximada para el momento en el que tenga un interés crematístico.
El Barça abrió un interesante melón este martes cuando anunció su propósito de iniciar un proceso para encontrar un patrocinador que quiera adquirir los 'title rights' del Camp Nou durante una temporada por un importe que se destinará a financiar proyectos de investigación e iniciativas destinadas a luchar contra los efectos de la Covid-19, tanto a nivel local como a nivel internacional.
Será la primera vez en la historia que el Camp Nou lleve el apelliido de alguna empresa multinacional o institución. La iniciativa, con un propósito altruista y absolutamente pionero, servirá también, no hay que negarlo, como experimento piloto para el Barça, que mantiene en su plan de futuro del Espai Barça la idea de unirse a un patrocinador que le financie parte del proyecto; y que de esta manera podrá saber qué cifras se están moviendo en el universo del naming rights, muy poco trabajado en LaLiga.
Mientras que en otros negocios de éxito como la NFL, el 80% de los estadios llevan el nombre de grandes empresas, en el fútbol no pasa igual a excepción de la Bundesliga. En Alemania, el 80% de los estadios en Primera llevan apellido, pero el porcentaje baja al 30% en la Premier. En España, apenas la Real (Reale Arena) y el Atlético de Madrid a medias (Wanda Metropolitano) tienen establecido el naming rights. En Segunda División, Riazor comparte nombre con Abanca. Y poco más. Nombres institucionales como Reino de Navarra o publicitarios como el Iberostar Stadium desaparecieron en Pamplona o Mallorca, respectivamente.
Según un informe (Champions League Stadium Naming Rights Study) de Duff and Phelps, asesor global, clubes como Barça y Madrid podrían obtener hasta 36,5 millones de euros anuales por el naming rights cuando sus estadios estén remodelados. No es el caso todavía. En la actualidad, con los recintos por reformar, se calcula en algo menos de 15 millones de euros el ingreso. El Arsenal se lleva 3,65 millones anuales de Emirates; el City, entre 12 y 14 de Etihad; y el Bayern, unos seis millones del Allianz.
El Barça deja claro que la empresa o institución que apellide el Camp Nou la próxima temporada no tendrá una opción preferencial sobre el futuro naming rights del campo. El contrato sólo tiene un año de duración y será articulado por la Fundació. Eso sí, debe aprobarse en Asamblea. Se da por supuesto que los socios compromisarios darán el visto bueno por el contenido social del proyecto. Eso permitirá que, involuntariamente o no, se abra la veda al 'title rights' del Camp Nou sin la oposición de los socios, como en el reciente caso del nuevo escudo que los compromisarios truncaron. Abierto ese melón, encontrar un apellido definitivo podría resultar más sencillo.