Rosell sólo ficharía a Neymar con un contrato condicionado a su "comportamiento" social
"Desde un punto deportivo, sin duda ficharía a Neymar. Pero con un contrato variable ligado a resultados deportivos y a resultados sociales y de comportamiento", dice en Mundo Deportivo.
"Ficharía a Neymar, sin duda". En la entrevista que Mundo Deportivo publica en papel este domingo, Sandro Rosell, el ex presidente del Barcelona vota por el regreso del brasileño al Barça con la paradoja de que fue su fichaje el que precipitó su dimisión como presidente del club azulgrana por la opacidad de las cifras de su fichaje. No obstante, Rosell no haría ese fichaje con los ojos cerrados, sino con condiciones para protegerse: "Desde un punto deportivo, sin duda ficharía a Neymar. Pero con un contrato variable ligado a resultados deportivos y a resultados sociales y de comportamiento. Por escrito".
Rosell siempre consideró el gran éxito de su mandato el fichaje de Neymar, a quien consideraba el sucesor de Messi en una opinión que, curiosamente, compartió incluso el argentino, que llegó a pedir a Neymar que no se fuese del Barça. "Te haré Balón de Oro", llegó a decirle Messi a Neymar durante la gira por Estados Unidos en 2017 para intentar convencerle de que no se marchase. Rosell entiende por qué el argentino sigue queriendo jugar al lado de Neymar: "Porque Messi, que es el mejor jugador de la historia del futbol y muy listo, quiere a los otros mejores jugadores del mundo a su lado para ganarlo todo. Neymar es único. Aporta un talento innato futbolístico único y un aura personal con un gran valor comercial".
Rosell tiene claro también que hay que ir pensando en un Barça post-Messi: "Es el jugador que más ha aportado en la historia del club. Pero Messi pasará, dejará un recuerdo imborrable y el Barça seguirá".
Sandro Rosell acabaría dimitiendo el 23 de enero del 2014 como presidente del Barça “cansado y enfadado”. Un socio del Barça, Jordi Cases, interpuso contra Sandro Rosell una querella criminal por apropiación indebida a causa de la "distracción de 40 millones de euros correspondientes al fichaje de Neymar". El Barça acabó admitiendo un delito.
En el acuerdo, que implicaba el reconocimiento del club de un error en la planificación de la fiscalidad del fichaje en los ejercicios de 2011 y 2013, se exoneró de delito al expresidente Sandro Rosell y al propio Bartomeu. El Fiscal de la Audiencia Nacional reclamaba al conjunto de los implicados más de 62 millones de euros. En el pacto con la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya y la Abogacía del Estado se exoneró a los presidentes de su gestión y se exigió al club que asuma los dos delitos fiscales por los que pagará 15 millones que incluyen las cuotas defraudadas y la multa, aceptada en el pacto, de 5,5 millones.