Dembélé, el confinado ‘invisible’
El delantero francés es el único jugador de la plantilla blaugrana que no ha compartido a través de las redes sociales sus experiencias durante el mes que dura el confinamiento.
A nadie se le escapa a estas alturas el carácter retraído y timidez enfermiza de Ousmane Dembélé, pero lo cierto es que se han visto potenciadas desde que se inició el Estado de Alarma que obligó a confinamiento de todos en sus domicilios.
Durante el mes que llevan los jugadores recluidos en casa, quien más o quien menos, han compartido con los aficionados sus experiencias personales. Algunos han colgado videos entrenando en casa, otros han participado en retos y actividades fomentadas a través de las redes sociales y algunos hasta han alentado a la gente a quedarse en casa o han hecho públicas donaciones para la ayuda contra la lucha contra la pandemia. Los más decididos hasta han participado en entrevistas con los medios oficiales del club o han realizado sesiones de chateo con los aficionados.
Todos, de una u otra manera, han puesto su granito de arena para hacer más llevadero este duro confinamiento ¿Todos? Pues no, siempre hay una excepción en un grupo. Y en el caso del vestuario del FC Barcelona es Ousmane Dembélé. El delantero francés sólo ha aparecido durante este mes para publicar el comunicado que Leo Messi envió como capitán para anunciar que la plantilla del primer equipo aceptaba la reducción salarial del 70% del sueldo mientras dure el Estado de Alarma a la vez que lamentaba las presiones recibidas por parte del club. Un comunicado que fue compartido por todos los jugadores sin excepción.
Esta es la única señal de vida de Dembélé durante su reclusión forzada. Nada se sabe de su recuperación -hay que recordar que el delantero fue intervenido el pasado 11 de febrero de una rotura del tendón del bíceps femoral de la pierna derecha-; en principio todavía le queda un largo recorrido, ya que el pronóstico inicial fue de seis meses, por lo que en el mejor de los casos estaría de vuelta en julio.
Tampoco con sus compañeros es que se comunique abiertamente. Aparte del ‘clan francés’, con los que sigue teniendo contacto, con el resto de jugadores de la plantilla apenas ha habido comunicación. De hecho, fue la única ausencia destaca entre los futbolistas en la reunión telemática que celebró la plantilla el martes. Una baja que, por cierto, fue comentada durante la conversación.
Su última imagen, compartida en Instagram, aparte del comunicado, se remonta al 20 de enero, donde colgó una imagen suya corriendo en la Ciutat Esportiva en la recta final de su recuperación. Desde ese día, el delantero francés ha desaparecido de las redes sociales.
En el club, por su parte, preocupa sobremanera que el confinamiento acabe por perjudicar a Dembélé. Y no sólo porque no puede seguir las pautas de rehabilitación de una forma idónea al tenerlo que hacer todo en casa bajo la supervisión de un recuperador sino porque podría regresar a alguno de sus malos hábitos debido al confinamiento, como jugar a videojuegos hasta altas horas de la madrugada o una dieta menos controlada a base de ‘fast food’.