"Estuve dos años sin hablar con Zidane tras su cabezazo..."
Sagnol, excompañero de Zidane en aquella Francia que perdió la final del Mundial 2006, habló de la expulsión de Zidane aquel día: "No quise aceptar sus disculpas".
Willy Sagnol (43 años), compañero de Zidane en aquella selección francesa que perdió la final del Mundial de 2006, rememoró en Radio Montecarlo aquel encuentro donde vivió las dos caras del fútbol. Por un lado, experimentó la euforia cuando en ahora entrenador del Real Madrid marcó en el minuto 7 un penalti a lo Panenka (adelantó a Francia) y la rabia y la decepción con la expulsión de Zizou tras un cabezazo a Materazzi en la prórroga y la posterior derrota en los penaltis. “Tengo mi mejor recuerdo y mi peor recuerdo a la vez”, comenzó diciendo Sagnol. “Ponemos mucho énfasis en el penalti de Zidane. Cuando haces un Panenka corres grandes riesgos. Mi primer pensamiento es que Zidane está completamente loco. Marcó y yo estaba súper feliz. Pero no sé, me dejó con un sabor amargo”, continuó.
Pero Italia empató (gol de Materazzi) doce minutos después y el partido se fue a la prórroga. En el minuto 3 de la segunda parte de esta prórroga tuvo lugar una de las imágenes que quedarán para siempre en la historia de los Mundiales. Zidane, que antes de este torneo ya anunció que se retiraba, propinó un cabezazo en el pecho de Materazzi tras una provocación del central ("Hablé de su hermana pero no de su madre, como he podido leer en algunos periódicos", manifestó el italiano años después), y acabó expulsado. Una expulsión que dejó tocado a Francia, que acabó perdiendo en los penaltis. Sagnol admitió que cuando llegó al vestuario estaba muy enfadado con Zidane: “Entras al vestuario, has perdido, tienes ahí a un chico que habla y se disculpa. ¡Pero no lo escuchas! Estás en tu decepción, en tu mundo (...) Yo no quiero aceptar sus disculpas, o conversar con él. Ahora no es el momento. Tuve que ir al baño, fumar 250 cigarrillos en diez minutos. Así es como me evadí", declaró el exjugador del Bayern.
Sagnol confesó en Team Duga que esa derrota en el Mundial y esa expulsión de Zidane dejó huella en la relación entre ambos: “No hablamos durante casi dos años. En 2008, después del Campeonato de Europa, tenía que casarme. Mi esposa me dijo que lo trajera. Lo llamé de vuelta. No podía venir por la noche, a la fiesta, pero me hizo feliz verle llegar en la mañana. Tomamos un aperitivo juntos. Tuvimos una buena conversación, luego la vida comenzó de nuevo”.