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ATLÉTICO

Pantic: "Mi gran sueño es entrenar al Atlético de Madrid"

El muy querido jugador serbio cuenta en primera persona para 'The Coaches' Voice' su llegada al club rojiblanco: "Mi fichaje fue cosa del destino, una historia de película".

Milinko Pantic, en 2016.
CHEMA DIAZDIARIO AS

Milinko Pantic hizo historia en el Atlético de Madrid del doblete y fue una apuesta personal de Radomir Antic. Uno de los jugadores más queridos por la afición rojiblanca, pese a que solamente vistió la elástica colchonera tres temporadas. Antes fue héroe del Panionios griego y promesa mundial desde sus inicios en el Partizán. Fue entrenador del filial del Atlético en la campaña 2011-2012.

El jugador serbio narra ahora, en primera persona, para The Coaches' Voice como se gestó su llegada al Atlético y sus primeras meses en la disciplina del Atlético. 'Una historia sin terminar' es su historia y sus sueños, a sus 53 años.

Radomir Antic: "Nuestra historia arranca en el Partizan de Belgrado. Él era el entrenador, 'El Maestro' como lo llamo yo. Después de un tiempo, él se fue a la Liga española, con el Zaragoza, y yo a jugar a Grecia, al Panionios".

Panionios: "Realmente la temporada 1994-1995 estaba siendo muy buena para mí, quizás la mejor en mi carrera como jugador: 20 asistencias y 17 goles. A mí me quedaba un año más de contrato con Panionios y el club tenía la intención de prolongarlo. También tenía dos ofertas encima de la mesa, una de la liga belga y otra de Francia".

Llamada de Antic: "Antic me pidió algún vídeo para ver cómo estaba jugando en el Panionios.. le dije: 'Entrenador, eso va a ser muy difícil, aquí nadie guarda ese tipo de cosas'. Un día me encontré con un periodista griego que trabajaba en TV y le dije de prepararme una cinta de mis cuatros años en Grecia. Se la mandé a Antic. No pasaron ni dos días cuando me volvió a llamar a casa para decirme que no firmara nada. Ahora estoy negociando con algunos equipos y quiero que estés conmigo".

Pretemporada 1995: "Yo me fui a Serbia a hacer la pretemporada con Panionios. La más dura de mi vida. Teníamos a un entrenador rumano, Inre Jemey, que ganó la final de la Copa de Europa en Sevilla con el Steaua de Bucarest. Era buenísimo, pero muy duro. Teníamos hasta tres entrenamientos en un mismo día. En medio de la concentración me enteré de que Antic había firmado por el Atlético de Madrid. Empezaron a salir nombres en la prensa: Robert Prosinecki, Enzo Scifo… Así muchos más nombres. Pero no el mío, y yo sin saber nada de Antic".

Fichaje Atlético: "Al volver de la pretemporada, volvió a contactar conmigo, con un mensaje muy claro: 'Te quiero firmar para el Atlético. Y va a ser así'. Tenía un año más de contrato con el Panionios y llamé al presidente: 'Sé cómo es Jesús Gil y todo lo que se habla de él como presidente del Atlético, pero tengo que probar. Creo que valgo para esto'. Tenía la curiosidad de saber si realmente estaba preparado para jugar a ese nivel. Mi fichaje por el Atlético de Madrid fue cosa del destino, una historia sobre la que se podría hacer una película".

Simeone: "En ese equipo tenía a Simeone como compañero de habitación. Un jugador competitivo al máximo, siempre con una mentalidad ganadora. Eso nos ayudaba muchísimo al resto, y, además, el año del doblete marcó muchos goles a pesar de que no era su especialidad. Una pieza básica dentro del equipo. En el Atlético del doblete todos éramos colaboradores de Antic. Cada uno teníamos que hacer nuestro trabajo para el bien del grupo. Simeone hizo el suyo perfecto, y lo está haciendo ahora como entrenador. Sus resultados hablan por sí solos".

Dificultades para ser entrenador: "Me había preparado muy duro para este nuevo paso, tomando conciencia de lo que quería hacer desde incluso antes de dejar de jugar. Sin embargo, no fue fácil sacar el título. Al contrario que otros muchos jugadores profesionales, yo no pude hacer el curso intensivo que ofrecía la Federación. No cumplía los requisitos. Así que me tocó ir por la vía que van la mayoría de los entrenadores. Tres años de preparación donde aprendí mucho del fútbol español".

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Filosofía como técnico: "No soy un entrenador de la escuela española, tampoco de la serbia. Me inclinó más por la holandesa. Órdenes directas y concretas, sin pensar tanto en el sistema. Eso queda más para la foto oficial antes del partido. A mí me importa más lo que pasa en el juego".

Experiencia en el Atlético B: "Los primeros cinco días de pretemporada con el Atlético B fueron los más difíciles y duros de mi vida profesional. Me encontré con hasta 36 jugadores. 29 de la plantilla y 7 que estaban a prueba. Subimos a los Ángeles de San Rafael para entrenar en un campito. Y cuando digo campito es porque lo era; no tenía las dimensiones habituales. Ahí tenía que preparar un entrenamiento para 36 jugadores, casi sin espacio para todos. Para preparar los entrenamientos en esas condiciones, casi no dormía la noche anterior"

La parte más dura de ser entrenador: "Yo pensaba, en un principio, al menos así me lo dijeron, que a los descartados se lo iba a comunicar el club. Pero no. El director deportivo tampoco hizo esa función. Al final tuve que ser yo quien se lo dijera a los chavales".

Presión como técnico: "También estaba la presión que se añade por lo que la gente espera de ti. Yo había disfrutado de grandes momentos como jugador del Atlético de Madrid, pero si los resultados no eran buenos, no iba a durar mucho ahí".

Salida por la puerta de atrás: "Firmanos una gran temporada donde se juntó una gran generación de jugadores. Ahí estaba, por ejemplo, Saúl; Manquillo, que ha tenido una gran carrera internacional. Al acabar la temporada, tenía un año más de contrato y el club, por las cosas de fútbol, tomo la decisión de no renovarme. La explicación fue que no era un entrenador para Segunda B, sino para un equipo más grande. No compartí ese argumento, pero lo acepté sin enfadarme".

Sueña con entrenar al Atlético: "Mi gran sueño permanece intacto: entrenar al Atlético de Madrid. Y estoy seguro de que ese momento llegará. Soy una persona muy ambiciosa que, tarde o temprano, termina alcanzando lo que quiere".