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HISTORIA | CAPITULO 1

El origen: Nettie Honeyball y el primer partido hace 125 años

Nettie Honeyball, la fundadora del British Ladies FC, fue la precursora del primer partido femenino reconocido por FIFA en 1895. Desafiaron las prohibiciones ante 10.000 aficionados

Imagen pictográfica del primer partido femenino en 1895.
FIFA

El fútbol femenino empezó a practicarse hace más de 130 años. La naturaleza violenta del fútbol que se consideraba un deporte de hombres no evitó que las mujeres quisieran probar el balompié. Ya en la década de 1890 se encuentran vestigios de partidos. En 1892 se jugó el primer en Glasgow (Escocia), pero no hay documentos gráficos que confirmen su existencia, así como otros encuentros que se disputaron en la época. Hubo que esperar a 1985 para encontrar el primer partido reconocido por FIFA sólo de mujeres ante más de 10.000 espectadores en Londres. Y tiene una heroína: Nettie Honeyball.

Activista de los derechos de las mujeres quiso demostrar que las mujeres tenían un sitio importante en la sociedad. En 1894 fundó el primer equipo de fútbol femenino, el British Ladies Football Club. No fue fácil encontrar jugadoras, pero a través de anuncios en los periódicos logró reunir a dos equipos para jugar el primer partido oficial. Hasta 30 jóvenes se presentaron para jugar. Fue el 23 de marzo de 1895 cuando en el Crouch End Athletic Ground de Londres se enfrentaron dos equipos compuestos únicamente por mujeres. Consiguió una asistencia multitudinaria, unas 10.000 personas según las crónicas de la época, fueron a ver el primer partido femenino. “Unos diez mil curiosos intrigados porel desempeño de la mujer en un juego que era considerado un pasatiempo masculino”, decían en The Guardian. El equipo de Honeyball ganó 7-1 en un espectáculo muy diferente al que vemos ahora.

Ataviadas algunas con zapatos de tacón, faldas por encima de pantalones y blusas, las mujeres dejaron claro que ellas también sabían jugar a este nuevo deporte. “Solo puedo decir que la impresión que dejó en mi mente el partido de esta tarde es que el espectáculo fue muy bonito. No hay nada desagradable en que una mujer dé puntadas a un balón”, explicó la cronista de The Guardian. También en Sportsman elogiaba el juego de las féminas: "Es cierto que los muchachos jóvenes podrían correr más y patear el balón con mayor fuerza, pero, aparte de esto, no creo que pudieran mostrar más conocimiento o calidad en su ejecución que las mujeres”. Eso sí, no todo fueron elogios y no a todo el mundo le gustó ver a mujeres jugando al fútbol. También hubo críticas, como en el Bristol Mercury (“no pueden y nunca jugarán al fútbol como debe ser jugado”)  o en el Daily Post que sentenció: “Por nuestra parte, nos alegramos de que las mujeres no puedan jugar al fútbol. Aunque sean capaces jugar, es un juego inadecuado para su sexo”.

La pionera Honeyball

Nettie Honeyball, la precursora del primer partido de fútbol femenino.
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Nettie Honeyball, la precursora del primer partido de fútbol femenino.

El Daily Sketch entrevistó en febrero de 1895 a Honeyball que explicó: "Fundé el club a finales del año pasado, con el objetivo de probarle al mundo que las mujeres no son esas criaturas ‘ornamentales e inútiles’ que los hombres pintan. Debo confesar que mis convicciones en todos los asuntos en los que los sexos están tan profundamente divididos están todos de parte de la emancipación, y deseo la llegada de un tiempo en el que las mujeres se puedan sentar en el Parlamento y tengan voz en la gestión de todos los asuntos, especialemente en aquellos que las conciernen más".

Quería que el fútbol femenino fuera una realidad y que durase en el tiempo. Así, convenció a J. W. Julian, jugador del Tottenham Hotspur, para que ejerciera de entrenador y tres veces en semana se reunían en un parque de Londres para entrenarse. Aunque hubo críticas despiadadas y una gran parte de la sociedad en contra de ver a mujeres jugando al fútbol, el British Ladies siguió jugando partidos. Disputaron partidos en Brighton, con una causa benéfica para la que recaudaron cien libras de la época, después jugaron su primer partido en en un campo profesional, el del Reading. Bristol, New Brompton, Walsall, Newcastle, South Shelds, Darlington y Jesmond también vieron a las mujeres jugar. Una gira de once partidos que puso punto y final a esta aventura. Cada una volvió a su vida y fútbol femenino se prohibió en 1902 por la FA. La lucha por la igualdad en el fútbol no había hecho más que empezar...