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REAL SOCIEDAD

La Real no se plantea presentar un ERTE

El club donostiarra espera pacientemente acontecimientos para estudiar qué medias tomar. Por el momento, no despedirá temporalmente a sus empleados.

Actualizado a
Aperribay, en una comparecencia como presidente de la Real Sociedad.
DIARIO AS

Los expedientes de regulación de empleo temporada amenazan a las diferentes empresas para poder afrontar la crisis generada por la alerta sanitaria del coronavirus. Los clubes deportivos no son ajenos a esos problemas económicos, especialmente por la suspensión de todas las competiciones deportivas, y en deportes como el balonmano o el baloncesto son varias las entidades que ya han planteado un ERTE entre sus jugadores y trabajadores para sobrevivir a la crisis sanitaria por el COVID19.

En el mundo del fútbol, la sorpresa ha saltado con la posibilidad de que el Barcelona siga ese mismo camino, algo que haría extensible a todas sus secciones. Eso ha provocado que en otros clubes de Primera hayan saltado las alarmas, porque nadie escapa a esta situación tan complicada y compleja por la paralización de un país debido a una pandemia tan grave. En la Real Sociedad, de momento, no se han planteado presente un ERTE entre sus trabajadores y jugadores, a los que ha tenido que tranquilizar ante las últimas noticias que llegaban de LaLiga aceptando que los clubes de sus competiciones pudieran agarrarse a esa posibilidad para ahorrar gastos y poder cumplir con sus presupuestos, mermados el muchos casos por la paralización de todo el deporte de competición. El club donostiarra ha enviado un mensaje de tranquilidad, señalando que no tienen necesidad en este momento, a pesar de las crisis por el coronavirus de hacer un Expediente de Regulación de empleo temporal, porque las cuentas las tiene saneadas y ordenadas, a pesar de la fuerte inversión realizada en los últimos años para acometer la reforma del estadio de Anoeta. Eso sí, se irán revisando las circunstancias según vayan desarrollándose los acontecimientos para ajustarse a las necesidades que requiera el club ante esta situación excepcional, con un desenlace imprevisible y unas consecuencias todavía desconocidas.

Con todo, en la Real entienden que el presupuesto de esta temporada lo tienen ya cerrado, y bien ajustado, y no creen que deben hacer ningún ajuste para poder cumplirlo, a pesar de la ausencias de ingresos que está teniendo la entidad donostiarra en este momento de crisis sanitaria con todo el país paralizado y sin deporte de competición. En la Real aseguran que están, incluso, preparados para aguantar hasta final de temporada para cubrir con su presupuesto, hasta en el supuesto extremo de que la liga no se pueda llegar a reanudar. En la Real ya han estado trabajando en todos los posibles escenarios, haciendo previsiones hasta con la cancelación definitiva de lo que resta de temporada, en cuyo caso el club donostiarra podía dejar de percibir casi 20 millones de euros, en concepto de derechos de televisión que no llegaría a cobrar, dinero de entradas de socios y aficionados, y otros conceptos de marketing y publicidad. En la Real ya trabajan en ajustar los gastos lo máximo posible mientras dure esta situación de confinamiento sin competición.

Por esa razón, ante posibles contingencias, la Real siempre presupuesta una cantidad de superávit de unos 10 millones en cada campaña. Para este curso 2019-20 tenía presupuestado 9 millones de euros, que evidentemente no lo va a poder cumplir y lo destinará a tapar el agujero que le haga esta crisis del coronavirus para no tener que presentar un ERTE. Pero es que, además, también tenía 7 millones de ganancias de las cuentas del ejercicio pasado, lo que significa que tiene 16 millones de remanente con lo que cubrir esas posibles pérdidas. No obstante, es bastante evidente pensar que de cara al curso que viene, el presupuesto puede verse algo mermado en las previsiones que inicialmente tenía estipuladas, pero eso será algo que habrá que estudiar cuando pase la alerta sanitaria y se vea la situación en la que se afronta lo que resta de temporada.