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Óscar Fernández: "Me sentí engañado por Alfonso García"

El valenciano, sin posibilidad de entrenar este curso en España al haberse tramitado su ficha, reconoce que se siente "disgustado" con Alfonso García.

Óscar Fernández: "Me sentí engañado por Alfonso García"

El 15 de junio del pasado año firmó por el Almería, siendo destituido apenas 49 días después tras la compraventa del club. Óscar Rubén Fernández Romero (1974, Valencia) tenía la ilusión de demostrar su valía en el fútbol español con un proyecto que le atrajo bastante. La decisión, además, le cortó la puerta de dirigir este curso a otro club español que no fuese el Almería, ya que su ficha había sido tramitada, viviendo ahora el periodo más largo sin entrenar después de tres lustros sin parar. Intenta reinventarse viendo fútbol y más fútbol para crecer como entrenador. También saborea cada segundo de la vida, como esos encuentros de su hijo en los alevines del CF Torrelevante. Antes de jugar una partida de parchís con sus hijos en su residencia de Torrente, conversa sin prisas con este medio tirando los tópicos a la basura.

- ¿Cómo está viviendo su cuarentena de un año sin poder entrenar en España?

Es complicado porque al final eran 15 años seguidos sin parar. Estoy aprendiendo tanto a llevarlo como a valorar cosas que antes no hacía. O sí las valoraba, pero no les daba mucha importancia. Estoy aprovechando el tiempo, viendo mucho fútbol y conociendo categorías. Cuando estás metido en la dinámica del día a día las olvidas.

- Dice que había cosas a las que no les daba importancia. ¿Cuáles?

Te centras mucho en el fútbol, le dedicas muchas horas, somos unos 'enganchados', por decirlo alguna manera, del fútbol y dejas un poco de lado a la familia. Ahora, por ejemplo, me encanta llevar al niño al 'cole' por las mañanas, poder dormir en casa con mi mujer, poder ir ir a ver a jugar al fútbol a mi hijo (algo que sólo hacía a ratos o en escapadas), juntarte con los amigos a tomarte una cerveza y charlas. Son cosas que antes al estar tan centrado en el fútbol estaban ahí, pero no le daba esa importancia de verlas como principales.

- ¿Debería cambiar la norma?

La norma es injusta en casos excepcionales. Hay que darle otro sentido a la norma porque yo, por ejemplo, no he entrenado. No he sido destituido por resultados, sino por una compraventa del club. Mi ficha se tramitó, pero no se utilizó. Hay casos excepcionales. Entiendo que hay que favorecer que todos podamos trabajar, pero al final el único perjudicado aquí es el entrenador. Creo que habría que modificarla, no te sabría decir cómo ni tengo pretensión de ello. Es complicado. Pero la norma me parece injusta, debería modificarse en casos excepcionales. Imagínate un proyecto y en cinco jornadas no sabes si va a ir bien o mal. Al final siempre se corta la cuerda por el lado más débil, el entrenador. Yo he vivido una situación en la que no llegué a entrenar. No he tenido la posibilidad de tramitar mi ficha tramitada.

- Ha hablado de un proyecto que en cinco jornadas puede ir mal. ¿Considera que no hay tiempo en este deporte?

Tú te preparas para desarrollar algo. Está montado en que todo funciona en base a resultados. Muchas veces habla la gente de sensaciones o de merecimientos. Al final hemos llevado el fútbol a resultadismos. Está montado así. ¿El tiempo? Tú no puedes ver el trabajo de una pretemporada en el primer partido. Estás generando un camino y tienes que dar pasos en el mismo. El tiempo es importante, sobre todo, la concepción del tiempo y por qué ese tiempo.

- Agosto de 2019. ¿Dónde, cuándo y cómo se enteró de la compraventa del club?

En la pretemporada estando en Marbella me entero de que el club cambia de manos. Me llama Miguel Corona por la noche, me transmite que el club se está vendiendo y que va a haber cambios. Sin más porque él tampoco tenía toda la información. Nos lo dice al cuerpo técnico y a mí. Así fue. Es que no hay más. Fue una sensación de extrañeza, no sabría definírtela porque fue complicada, bastante complicada.

- Ocurrió de manera inopinada, pero en los últimos tiempos se hablaba de que Alfonso García quería vender. ¿Cuando firmó podía imaginar que unas semanas después se podía producir un cambio parecido?

Cuando yo firmé el club no se iba a vender. Yo tenía ofertas de otros equipos y la posibilidad de seguir dos años en el Atlético de Madrid. A mí no me dicen nunca que se va a vender el club. Yo me sentí engañado. Es la realidad. Me sentí engañado porque si yo hubiese sabido de esta posibilidad, hubiese mantenido mi cargo en el Atlético de Madrid o hubiera valorado otras opciones que surgieron en ese verano. Es verdad que a toro pasado todo puede valorarse de otra manera, pero yo creía que era el momento de salir al fútbol profesional. Vi al Almería como una opción de crecer y desarrollarme. Me gustaba el proyecto de 'guerra', por decirlo de alguna manera, que se estaba desarrollando. Por eso me decidí por el Almería y por eso me da rabia que yo no estuviese enterado un poco o que me hubiesen ocultado algo; de hecho, lo pregunté y no se me dijo en ningún momento que el club se iba a vender, sabiendo que anteriormente había estado en venta, pero sin valorarse en ese momento.

- ¿Cree que Alfonso García sabía que podía venderse cuando usted firmó?

Mira, te lo voy a explicar muy fácil. Hay una persona que se llama Turki que compra un coche. En ese coche decide quién entra y decide que yo no vaya. Me parece lógico y coherente. ¿Que lo comparta o no? Es una cosa mía. Personal y sinceramente me hubiese gustado que me diese la oportunidad. Pero él está en su libre derecho porque al final él es el que compra el coche y decide quién viaja en el mismo. Decide que quiere cambiar de entrenador y yo sólo puedo mantenerme al margen y respetar su decisión. Por eso yo nunca he tenido nada en contra de Turki. He tenido la rabia de que no me dejase demostrar que podía ser el entrenador del Almería. A partir de ahí, con el que estoy enfadado o disgustado, y no me gusta hablar mal de nadie, es con la otra persona porque siento que me engañó.

-Con Alfonso.

Correcto.

- ¿Piensa que él sabía que iba a vender?

Son suposiciones, no sé decir. A esa pregunta no sabría darte una respuesta. Te puedo decir que la noche de antes estábamos hablando de futbolistas parar cerrarlos. De hecho, hubieron fichajes que se pararon. Miguel Corona, Ibán Andrés y yo estábamos hablando con futbolistas y de golpe y porrazo todo se paró. No hay más. Por eso te digo que el único perjudicado de esta situación he sido yo porque al final estoy sin poder entrenar un año, sin haber entrenado y sin haber tenido esos malos resultados para que me pudiesen cesar. A mí se me ofrece seguir en el Almería como coordinador de la cantera y en el filial, con un gran sueldo, pero yo había ido por unas personas que apostaron por mí y había dejado un gran filial, como es el del Atlético de Madrid, porque creía en ese proye que le ofrecieron un puesto en el club. ¿Por qué declinó la opción?

Porque, mira, yo había salido del Atlético de Madrid para entrenar en Segunda División. Me surgió el Almería, que me parecía muy top para crecer y mejorar, con un proyecto superbonito; fui con unas personas y esas personas no iban a estar en el proyecto. Lo coherente era desplazar y salir del sitio donde no me iban a dejar desarrollar ilusión que tenía: ser entrenador de la Unión Deportiva Almería

- ¿Qué tal era o es su relación con Miguel Ángel Corona e Ibán Andrés?

Muy buena. Los considero amigos. Son dos profesionales que hicieron un trabajo excelente porque habían muchas dificultades para hacer un equipo y ellos trabajaron mucho y bien. Teníamos una relación diaria, estábamos creciendo, inventando un equipo chulo para Segunda División en un proyecto a medio plazo. Siempre tendré palabras de agradecimiento tanto para Ibán Andrés como para Miguel Corona porque me abrieron la puerta el fútbol profesional. Siempre les estaré agradecido.

- ¿Cómo hubiese sido el modelo de juego del Almería de Óscar Fernández?

Lo que se vio en pretemporada, un equipo que quería dominar, que iba hacia delante, con presión alta, organizado, que se juntaba muy bien para defender y luego con balón tenía mucho criterio. El día que jugamos contra el Granada se vio un esbozo de lo que íbamos a ser. Estábamos cocinando algo muy chulo.

- Excepto Juan Ibiza, se marcharon todas las entradas previas a la llegada de Al-Sheikh. ¿Qué jugador le sorprendió más?

Desde el primer día que Miguel Corona e Ibán Andrés me dijeron que Simón Moreno me dijeron que se incorporaba... Yo ya lo tenía controlado del Villarreal B. Es un futbolista que nos iba aportar muchísimas cosas, lástima la lesión que ha tenido, creo que iba a evolucionar y nos iba a ayudar muchísimo. Peybernes nos hubiera venido muy bien porque es uno de los mejores centrales de la categoría. Y Yanis me parece un futbolista que cada día que pasa en Lugo va a mejor. Tiene desborde, siempre va hacia delante, domina el tema de las transiciones... Me parece un jugador muy a tener en cuenta.

- ¿Ha habido posibilidad de volver?

No, no, no. Todo rumores, todo rumores. Nunca me llamaron. Existía la posibilidad, al final nunca sabes, pero no hubo contacto directo ni decir vamos a intentar traer a Óscar.

-¿Le gustaría entrenar al Almería algún día?

Mira, yo lo único que puedo decir del Almería es que me he sentido identificado con su gente, me han tratado muy bien, le tengo un cariño especial, fui mi primer paso al mundo profesional. Siempre estaré agradecido a la afición por cómo me trató. ¿Que fue una pena? Grande, estaba muy ilusionado. A partir de ahí no puedo valorar si me van a llamar. Soy entrenador y ojalá tenga alguna oferta de Segunda División y si fuese del Almería, encantandísimo. Estoy agradecido a la gente de Almería, le deseo lo mejor, ya lo dije en su momento. No tengo nada en contra de ellos; como te he dicho antes al principio, llegó una persona nueva, decidió comprar el club y en ese coche montó a los que quiso y ya está. Simplemente desearle lo mejor y que acabe bien.

- Ya no sólo como entrenador, sino como aficionado al fútbol. ¿Qué opina del proyecto?

Tiene muchas versiones o lecturas. Creo que el proyecto está bien, es una apuesta de una persona que invierte. Se han hecho fichajes muy buenos, el equipo me parece un equipo muy top. A partir de ahí lo que te diría es desde la lejanía porque no se cómo funciona el día a día. Mentiría dando una opinión de algo que no conozco, así que prefiero evitarlo. El equipo me gusta, con la incorporación de Jesús [Muñoz] y Víctor [Mañas] han dado un paso importante, van a ser de mucha ayuda para José María Gutiérrez. Van a hacer lo que todos esperábamos hacer.

- ¿Estarán dentro de unos meses en Primera?

Es tan complicada esta Segunda... Pero creo que ya han pasado el mítico bache de la Segunda. Es tan larga que ya han pasado el bache. Están ahí. Cuando se vuelva a reanudar se va a poner bonita, pero bonita de verdad. Va a estar muy disputada hasta el final. Fíjate, al Cádiz le cuesta ganar más ahora, pero no pierde, tiene un equipo que sabe lo que tiene y a lo que juega; están también el Zaragoza, el Girona... Va a estar bonita. Por toda la gente que conocí ahí, me gustaría que el Almería subiese.

- ¿Tuvo mucha parte el trabajo realizado por su grupo de trabajo en julio para que el Almería sacase 16 de 18 puntos en el inicio liguero?

Mira, eso sería hacer valoraciones que no vienen al caso. Yo lo que estoy es feliz y contento por lo que hicimos y por lo que estábamos desarrollando. Valorar el trabajo de otro compañero me parecería injusto. Él fue el que planteó los partidos. Yo lo único que puedo decirte es que los 35-40 días que estuve allí fui muy feliz, trabajé con un grupo de futbolistas que se merece todo mi respeto, disfruté muchísimo trabajando. Entrar a valorar lo que hizo Pedro en esas jornadas me parecería injusto por mi parte. No soy así. Ya dije que le deseaba lo mejor. No estuve en esos momentos y no puedo opinar si tuve parte o no.

- La pasada temporada entrenó al filial del Atlético de Madrid. ¿Qué tal está viendo tanto al primer equipo como al 'B'?

Bien, bien. Diego saca recursos, rendimiento, es top, lo está demostrando. Fíjate el otro día ante el Liverpool. Hace al grupo crecerse ante las dificultades. Yo sólo puedo estar agradecido a Diego, me trató excelente durante los cuatro años que estuve a su lado y aprendí muchísimo de él: a gestionar, a exigir... Es un líder nato. Lo que está haciendo en el Atlético de Madrid es crecerse ante las dificultades, hacbiendo mejores a los futbolistas. Y luego la temporada que está haciendo el filial con Nacho es sensacional. Con un equipo joven está realizando cosas interesantes y en puestos de playoff. Ojalá acabe ahí porque se lo merecen. Es un equipo con una juventud llamada a la élite y con futbolistas muy muy interesantes.