"Los jugadores tendrán que sacrificar parte de su ficha"
El economista advierte de que los futbolistas deberán hacer un gesto con las entidades para hacer viable a los clubes o, de lo contrario, "habrá problemas graves".
El economista José Gay de Liébana considera que si la crisis del coronavirus persiste, en la afectación que tiene en el deporte, y concretamente en LaLiga, los jugadores "deberán sacrificar parte de sus fichar para hacer viable a los clubes o, de lo contrario, habrá problemas graves en las entidades".
En una conversación telefónica con EFE, Gay de Liébana expuso con contundencia lo que considera "un momento muy crítico" para la viabilidad de las entidades "si persiste este paro", el cual considera que si se alarga unas semanas más debería llevar a las federaciones a "neutralizar los campeonatos y volver a iniciar de cero a partir de la temporada que viene para evitar injusticias deportivas".
De Liébana es uno de los economistas más visibles en materia deportiva en el panorama español, y acostumbra a exponer en sus conferencias los números de las grandes ligas de fútbol en Europa y a compararlos, enviando casi siempre un mensaje de alerta porque muchas de las entidades "viven por encima de sus posibilidades", y señalando sin disimulo lo que observa como una nueva "burbuja del fútbol".
Con la situación inesperada que ha invadido el día a día de millones de ciudadanos en todo el mundo, a raíz de la pandemia por el coronavirus, De Liébana considera que este es un momento en el que la fragilidad económica de las instituciones deportivas podría llevar a más de una a pasar por un trance entre la supervivencia y la desaparición. Ante este momento inesperado, De Liébana ha reclamado a los representantes de los jugadores y a los propios deportistas, así como la AFE, que entiendan que si la situación persiste "los futbolistas deberán hacer un gesto con las entidades y bajarse las fichas esta temporada".
Gay de Liébana, que está en pleno proceso de tratamiento por un cáncer que él mismo anunció hace unos meses, lo que le convierte en estos momento en factor muy vulnerable, aseguró que todos "tenemos que resistir el momento, pero algunos deber algo más que otros". "Los jugadores tendrían que renunciar en buena lid a parte de su ficha, porque en la medida en que no hay competiciones, los clubes van a dejar de ingresar. No sé qué pasará con la temporada, pero creo que un gesto que les honraría sería que dejasen de ingresar parte de sus fichas. Los clubes van a tener que tomar medidas porque no les van a llegar las fuentes más importantes de sus ingresos: los derechos de televisión, mercadotecnia y taquillaje", explicó.
"Si no hay competiciones, el patrocinador puede argumentar que no tiene visibilidad, y es comprensible, porque tendrá todo el derecho a no pagar, igual que el socio. Si esto se alarga, es normal que haya una serie de replanteamientos y los jugadores tendrían que hacer un esfuerzo. De momento, sólo se ha suspendido una jornada. Ahora el momento es grave, pero no gravísimo. Pero si dentro de dos semanas seguimos igual, que da esta impresión, porque esto no se normalizará hasta septiembre, todo el mundo tendrá que sacrificarse", argumentó.
De Liébana defendió la viabilidad de los clubes y señaló: "Lo que no se puede consentir es que los clubes se encuentren en la picota como consecuencia de esto tan extraordinario e impredecible. Si no quieren renunciar los jugadores a su dinero, será difícil la viabilidad de la mayoría de entidades. Aquí hay que ver cómo actúa la cláusula de derechos de televisión, entre otras". "Para clubes que son modestos, como el Espanyol, que recibe 50 millones de televisión de los 80 de su presupuesto, la entrada en un bache es casi el destino en este momento. LaLiga ya ha cifrado la pérdida en casi 700 millones de euros. Clubes como el Barcelona y el Madrid van a sufrir una enganchada de miedo, porque tienen diferentes vías de ingreso, como la televisión, Champions, patrocinios, etc., y con el grifo cerrado...", subrayó.
"El grifo se ha secado y el capítulo de gasto más importante, el abono de las fichas, no se ha detenido. Aquí se da la siguiente circunstancia: los clubes cuentan cada mes con el dinero que ingresan cada mes; de televisión, tanto, de patrocinadores, tanto; y de taquillaje, tanto. Por lo tanto, se va a dar un desequilibrio de una magnitud que puede ser brutal, con cada equipo en su escala", concluyó.