Oleg Blokhin
Tras la derrota del Real Madrid ante el Chelsea en la final de la Recopa de 1971, Paco Gento ponía punto y final a una trayectoria en el Real Madrid que había empezado en 1953 junto con Di Stéfano. Dos temporadas después, en 1973, el Madrid se enfrentó al Dinamo de Kiev en un encuentro de Copa de Europa. El encuentro, celebrado en Odessa, acabó en empate gracias a una colosal actuación de García Remón. En el conjunto entonces soviético brillaba Oleg Blokhin en la banda izquierda. Hijo de una atleta, era un jugador veloz (con 16 años corría los 100 metros en 11 segundos), explosivo y habilidoso. El Madrid quiso ficharle, pero se encontró con un muro: la infranqueable burocracia del régimen soviético impidió su salida. Le volvería a pasar en 1975 (le ascendieron a coronel del Ejército: una manera de retener a la gente era ascenderlos en el organigrama militar para compensar sus escasas ganancias), y en 1982. En esta ocasión el muro se produjo en el estadio Santiago Bernabéu: en la tercera edición, en 1981, en el encuentro Real Madrid-Dinamo Tbilisi, Ángel lesionó a Kipiani, georgiano y una de las estrellas del conjunto soviético por entonces. Fue tan dura la entrada que casi acabó con su carrera: seguiría jugando, pero ya no era el jugador fantástico que lideraba la selección de la URSS. Y, eso, la burocracia soviética no lo perdonó…