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El Leganés, pendiente del caso Suso para fichar a Bryan Gil

Si el gaditano acaba en el Sevilla, aumentarían las opciones de que el joven extremo terminase en Butarque. Los pepineros tienen una opción preferencia tras la venta de En Nesyri.

Bryan Gil en acción.
MIGUEL MORENATTIDIARIO AS

El Leganés permanece atento a la evolución del caso Suso en el Sevilla. El posible fichaje del gaditano por los hispalenses podría abrir las puertas de salida del Sánchez Pizjuán a Bryan Gil. En tal caso, el Lega tendría una opción preferencial. En Butarque hay esperanzas de que la concatenación de movimientos acabe con el canterano rojiblanco luciendo el escudo del laurel antes del 1 de febrero.

Tal y como contó AS, el fichaje de En Nesyri por el Sevilla abrió la posibilidad de que el Lega atara a este extremo izquierdo de apenas 18 años, una de las perlas más mimadas y valoradas en las inferiores de Nervión. En las oficinas de Butarque ya habían preguntado por él, pero la respuesta siempre era la misma: Bryan no se mueve. El temor a que su bisoñez pudiera pasarle factura en su crecimiento deportivo siempre echó atrás al Sevilla.

La operación de En Nesyri, sin embargo, permitió al Leganés arrancarle al Sevilla un pacto de caballeros por el que, de dar luz verde a un préstamo de Gil, fueran ellos, los pepineros, el primer equipo destino del chaval. En el Pizjuán aceptaron y el propio futbolista no vio con malos ojos esta posibilidad si así podía jugar los minutos que no tiene en la capital andaluza.

Así las cosas, la búsqueda de un atacante con el que contentar a Lopetegui inyectó más ánimo en el Leganés, toda vez que la presencia de otro jugador ofensivo, ahora sí, casi dejaría a Gil sin oportunidades de jugar luciendo la zamarra rojiblanca. El nombre escogido finalmente por Monchi es Suso, con el que Milan y Sevilla avanzan en las negociaciones rumbo a un desenlace que se promete inminente.

De provocar la partida de Bryan Gil al Leganés, se convertiría en el extremo que venía reclamando Aguirre para, en caso de que fuera necesario, jugar con algo más que el 5-3-2, el mecanismo habitual del equipo por la confección que se hizo en verano, un plantel pensado para la fórmula habitual de Pellegrino.