ATLÉTICO DE MADRID 0 - LEGANÉS 0 | EL ANÁLISIS
¿Por qué ya no presiona el Atleti de Simeone al rival? ¿Cuestión física o cuestión táctica?
Nuevo primer tiempo nefasto del Atlético, siendo dominado por el Leganés ante el estupor de los aficionados rojiblancos. Simeone mandó al equipo arriba en la segunda mitad, pero se equivocó en los cambios y logró un empate que supo a derrota en el Wanda Metropolitano.
El Atlético volvió a realizar un primer tiempo muy malo ante el Leganés. Le dio el balón al equipo pepinero y realizó un repliegue intensivo buscando robar el balón y lanzar el balón a Morata. Buscando una explicación táctica a por qué la mayoría de las primeras partes que hace el Atlético de Simeone esta temporada han sido horribles se podría concluir que el entrenador argentino sólo da una indicación a sus jugadores: balón largo a Morata y si este lo engancha, salimos de campo propio. Si no se produce esta jugada, no hay plan B, no hay otra instrucción táctica del entrenador según lo visto al analizar al detalle el primer tiempo del Leganés, así como todos los primeros 45 minutos en los que el Atlético ha dado una pésima imagen. El primer tiempo, Cholo cocinó su pizza habitual y jugó con sistema 1-4-4-2 y en la segunda mitad cambió a 1-4-3-3, mientras la pizza pepinera de Aguirre fue un 1-5-4-1 perfectamente ejecutado en fútbol combinativo y repliegue.
Sin presión. El Atlético no salió a presionar al Leganés. Al contrario, se replegó en su campo y el dominio del balón y Oblak realizó más paradas que Pichu Cuéllar en la primera mitad. ¿Por qué no presiona el Atleti de Simeone al rival en las primeras partes? Esa es la duda que surge. ¿No presiona por una cuestión física? ¿Es que el equipo no aguanta más de un cuarto de hora apretando al rival en campo contrario? ¿O es una cuestión táctica? O sea, que Simeone ordena al equipo ese repliegue intensivo para salir al contraataque y le da igual que sea en el Wanda Metropolitano ante un equipo con menores recursos como el Leganés. Los últimos minutos de la primera parte presionó a tres cuartos de campo y en la segunda mitad adelantó líneas y salió a tener el balón y dominar al Leganés. ¿Por qué no lo hizo desde el principio?
Pensando en defender. Los ataques que realizó el Atlético en la primera parte se iniciaron en campo propio con arrancadas de Morata y Joao Félix que no tuvieron éxito por la distancia que tenían que recorrer y por hacer cada uno la guerra por su cuenta. Sólo realizó bien un ataque rápido en el que Correa llegó por la derecha y llegaron al área a rematar Marcos Llorente, Joao Félix y Morata, que remató y para Cuéllar. Da la impresión que los jugadores del Atlético cuando atacan están pensando en qué hacer cuando pierdan el balón para defender, que no se centran en las jugadas de ataque y que además no están ensayadas, porque muchas veces no saben a quién pasar ni como realizar la progresión en el juego.
Errado en los cambios. Simeone no estuvo fino en las sustituciones. Dio entrada a Vitolo y quitó a Marcos Llorente en el descanso cuando había sido el mejor de los medios en la primera parte. Saúl no dio un pase bien y Thomas no tuvo ni tempo ni ritmo ni tampoco acierto en la entrega. Los dos merecían más ser sustituidos, aunque quizás el Cholo quitó a Llorente para evitar que viese una tarjeta que le acarreaba suspensión para el derbi del Bernabéu del próximo sábado. También quitó a Correa y puso a Herrera (el mexicano desesperó a los hinchas colchoneros por lo mal que botó los saques de esquina) cuando el argentino era el único puñal ofensivo. Y a Saponjic le sacó cuando quedaban unos minutos, cuando debió sacarle veinte minutos antes ante la necesidad de meter centros al área buscando el triunfo.
Sin alternancia en el juego. El fútbol directo le ha funcionado a Simeone en toda su exitosa y laureada etapa, pero no ha jugado sólo al lanzamiento largo y buscar la segunda jugada, también ha dado otras alternativas, menos esta campaña que no tiene plan B, además de no estar tan acertados en hacerse con el rechace y de no llegar al área rival en los contraataques con muy pocos efectivos. Cuenta con una plantilla para realizar alternancia en el juego y manejar varios sistemas y varios planes tácticos, pero sólo tiene uno y parece no querer realizar otros planes y dotar a sus jugadores de armas para atacar más y mejor. El empate ante el Leganés supo a derrota en el Wanda Metropolitano. La pizza cholista se atragantó al mediodía y a Aguirre le quedó mejor la pizza pepinera.