REAL MADRID-SEVILLA | LA INTRAHISTORIA
El fin de las cláusulas del miedo posibilita la visita de Reguilón
El lateral encontró acomodo en el Sevilla de Lopetegui cedido por el Real Madrid, donde brilló con Solari pero no contaba para Zidane.
Sergio Reguilón regresa mañana a la que ha sido su casa desde que ingresó en el Madrid con ocho años siendo benjamín. Sin 'cláusula del miedo' (el club blanco las eliminó este verano), será la primera vez que el lateral, de 23 años, juegue en el Bernabéu como rival. Lo hará a las órdenes de un Lopetegui que confió en él para tenerle la pasada campaña en la primera plantilla. Sólo jugó un partido con el técnico de Asteasu (en Moscú), pero esa decisión veraniega posibilitó la inquebrantable apuesta de Solari por él durante los cuatro meses y medio que el argentino estuvo en el banquillo. Un cuatrimestre en el que dejó actuaciones sobresalientes. Sobresaliente frente al Barcelona, salió airoso ante Messi y Luis Suárez.
El regreso de Zidane, sin embargo, le devolvió la titularidad a Marcelo. El francés no contaba con Reguilón y tuvo que buscarse destino. No tardó en encontrarlo, amparado por un Lopetegui que lo reclamó para el Sevilla. "Por el equipo, por el míster, por la idea de juego, por cómo iba a estar yo en el equipo, por la Liga española... Era la mejor opción y no me arrepiento de nada. Me despierto feliz. Siempre estoy de buen rollo", ha manifestado esta semana en los medios del Sevilla. El club ha restringido su exposición mediática esta semana, limitándola a esa aparición en los canales oficiales.
Reguilón se ha identificado con su nuevo club desde el primer día: "Me sé el himno de Sevilla desde que era pequeño. Es una canción que me encantaba. Poder representarla con este escudo... cómo no voy a cantarla", dice también en sus declaraciones.
Pese a no entrar en los planes de Zidane, en el Madrid tienen plena confianza en el futuro del canterano (casi doce años en La Fábrica). Por eso se cerraron en banda a incluir una opción de compra a favor del Sevilla en el contrato de cesión. La idea es repescarlo cuando acabe este año de cesión, aunque la última palabra será la opinión que tenga Zidane.