Barral, Óscar Gil y Cayarga cada día parecen más lejos
Descartados para el partido de Anduva, vieron desde el campo nº2 como sus compañeros iniciaban el partidillo en el nº1. Los tres tienen la puerta abierta
La imagen de ayer pareció muy fuerte, toda la plantilla apta jugando un partidillo en el campo nº1, mientras que Óscar Gil, Berto Cayarga y David Barral esperaban, parados en el nº2 a que alguien les dijera lo que tenían que hacer. Al cabo de un par o tres de minutos el gaditano dio una voz, alzando los brazos, lo que alertó a Cristóbal Parralo, que instó a su preparador físico, Luis Fandiño, a que los atendiera de inmediato. El gallego se disculpó alegando que estaba tirando las líneas del campo para jugar el partidillo e inmediatamente pasó al campo nº2 y dirigió el trabajo de los tres descartados. Pese a lo que pareció inicialmente, quedó en un error sin mala intención..., que no gustó nada a Cristóbal.
Una de las razones por las que se produjo la escena anteriormente descrita es porque en el entrenamiento del martes estaban sobre el césped los 24 jugadores con ficha del primer equipo, más Lucas Díaz, Manu Hernando, Camus y Tresaco, que tienen licencia del Rayo Cantabria. Una vez que acabaron la sesión de vídeo en la que Cristóbal puso el acento sobre el primer tiempo que perpetró su equipo en Anduva y pasaron luego por el gimnasio, saltaron los 28 jugadores a los terrenos de juego. Kitoko y Camus siguieron su trabajo de rehabilitación con Luis Prieto, el readaptador del equipo, y el resto se pusieron a las órdenes del míster. Incluido Karim Yoda, que ya ha superado la dolencia en la cadera que le impidió entrenar el pasado domingo.
El plan de trabajo del equipo, que no jugará partido oficial hasta el jueves 16, pasa por entrenar el miércoles en Santander (10:30) y jugar por la tarde (19:15) en Reinosa, entrenar el jueves, librar el viernes y comenzar el sábado a preparar el partido contra el Deportivo en Riazor.