La Copa también sirvió a Sergio para sacar conclusiones
Corral, Aguado o Miguel se postularon ante Sergio en Tolosa
Sergio González, entrenador del Real Valladolid, suele afirmar que cada partido cuenta y que de todos se pueden sacar conclusiones. La Copa del Rey, tan esperada por aquellos que han tenido poco protagonismo en Liga y por él mismo, no iba a ser menos. Aunque la categoría del Tolosa invita a no utilizar dicho encuentro como vara de medir, lo cierto es que se pudo comprobar la valía de jugadores como Corral y Miguel, junto a Aguado, seguramente los tres que más aprovecharon los minutos para postularse de cara a la competición principal.
Los canteranos son dos de los pilares sobre los cuales se sustenta el buen rendimiento del Promesas, que se encuentra a día de hoy en puestos de playoff. El buen hacer defensivo (el conjunto de Javi Baraja es el equipo que más tiempo lleva sin encajar de Segunda B: 382 minutos) tiene varios nombres propios, entre ellos el del lateral debutante en Berazubi.
Después de un inicio de encuentro un tanto dubitativo, el lateral zurdo se soltó y creció, subiendo y bajando con soltura una banda izquierda que, sin Nacho, parece desguarnecida y deja dudas, debido al bajo rendimiento ofrecido por Barba en lo que va de temporada. Así, no son pocos los habituales a Los Anexos que van pidiendo que el canterano tenga una mayor presencia, después de mostrar su valía ante el Sporting, en el amistoso de Palencia, y, muy especialmente, ante el Tolosa.
Miguel, por su parte, ha roto ya su mejor marca como goleador en Segunda B. Suma diez goles, dos más que la pasada campaña, que le convierten en máximo anotador del Grupo II. En los 45 minutos de que dispuso en Tolosa, se vio a un Miguel voraz, incisivo en la presión, que provocó varios errores en la salida de balón local (tal y como hace con el Promesas), y solidario, dando dos asistencias a Aguado. En la primera, se escoró demasiado como para finalizar jugada él, pero en la segunda podría haber optado por conducir él desde el centro del campo en lugar de lanzar el contragolpe con la pared trazada con Aguado.
El dibujo
El esquema usado por Sergio fue diferente del habitual con dos delanteros; optó por trazar un triángulo en el centro del campo en el que jugaron Alcaraz, Anuar y el propio Aguado. Funcionó, aunque esto se debe contextualizar: al Tolosa no le aguantó la gasolina y hubo un tramo inicial con algún error de colocación, sobre todo porque se solapaban.
Aguado hizo dos goles, fue a más con el paso de los minutos y se mostró cómodo sobre todo con espacios y en tres cuartos de campo, próximo al delantero, algo que puede dar a Sergio una idea para replicar: a falta de goles y de juego en esa zona, quizás este esquema sea la solución.