Gameiro vio el agujero y el Valencia remonta
El Levante se adelantó con un doblete de Roger pero el Valencia reaccionó tras un golpe de suerte. Rodrigo y el francés se ensañaron con los dos centrales granotas
Nadie daba un euro por el Valencia a la media hora de juego. El Levante zarandeaba a su enemigo con un Roger estelar. Sin embargo, un cambio de piezas adecuado y un golpe de suerte en el descuento de la primera mitad le metió en el derbi. Y en la segunda parte, dos tiburones como Rodrigo y Gameiro vieron el agujero en el centro de la defensa granota y se ensañaron con dos centrales noveles como Coke y Eliseo. El francés se los comió en dos minutos para darle la vuelta al choque y Ferran, ya con el Levante mutilado y con uno menos, sentenció.
Una hora antes, el Valencia había salido a contemporizar; y el Levante, a comerse el derbi a bocados. La primera dentellada en el novedoso 4-1-4-1 de Celades la dio Roger. Al Pistolero le van los derbis. En el 10’, jugada personal, recorte a un displicente Garay y disparo al primer palo que se come Cillessen. El Valencia aún no sabía de qué iba el derbi. El Levante controlaba el balón y Parejo no la olía. Seguramente fruto de esa frustración, el capitán ché enganchó por detrás a Rochina en el filo de la navaja y Medié pitó penalti. Segundo disparo de Roger que besó la red de Cillessen. El Valencia se desangraba en ese instante.
Celades deshizo su engendro y volvió a la zona de confort que le otorga en 4-4-2 heredado de Marcelino al Valencia. Era el minuto 28 y por entonces Cillessen ya se había ido al vestuario lesionado. El cambio de dibujo le dio vida al Valencia cuando ya boqueaba. Rodrigo marcó en fuera de juego; Gameiro falló en boca de gol ante Aitor, tras una jugada de pin-ball; y cuando ya llegaba el descanso, apareció la pizca de suerte que necesitaba el Valencia para que todo cambiara. Parejo sacó un córner, Coquelin peinó y Roger marcó al intentar despejar. El hat-trick que buscaba lo hizo en propia puerta.
Se esperaba un Valencia enchufado tras el descanso pero fue el Levante quien volvió a empujar. Morales probó a Jaume con dos disparos. Pero el de Almenara sí que estaba en el sitio que debió estar antes Cillessen. Justo después, el Levante se dio un tiro en el pie. Miramón le dio un pase al hueco a Rodrigo sin querer y este galopó y le regaló el empate a Gameiro, que la empujó de cabeza. Con un Levante noqueado, Rodrigo insistió en el agujero, ya un abismo a esas horas, y se la puso a Ferran entre los centrales. El canterano se la dio a Gameiro que la puso en la escuadra. Todo en dos minutos.
Paco López se la jugó con los cambios intentando la contrarremontada pero Eliseo vio la segunda amarilla enseguida y todo se desmoronó bajo los pies del Levante. Ferran, en los últimos minutos, marcó el cuarto, en una contra letal para los granotas.