Alcaine: "Desde la temporada anterior los salarios de las jugadoras han subido un 30%"
"Sin convenio, el 75% de las jugadoras de los 13 clubes de la ACFF superan las condiciones que reivindican los sindicatos", destaca el presidente de la Asociación.
La Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF), a la que pertenecen todos los clubes de Primera excepto Tacon, Barça y Athletic, compareció este martes ante los medios en medio de la confrontación con los sindicatos en el bloqueo del convenio y la llegada de la huelga de futbolistas (16 y 17 de noviembre). En una rueda de prensa organizada en la sede de LaLiga, se personaron los presidentes de todos los clubes adeptos a esta Asociación después de una reunión en la que trató como tema principal el convenio. A la cabeza de ellos, Rubén Alcaine, presidente de la ACFF, quien abrió el turno de palabra destacando que van a seguir buscando "vías para resolver esta situación".
"Es verdad que a nivel mediático se dice que están en una situación precaria y no es justo porque ha habido un crecimiento objetivo. Sin ir más lejos, de la temporada anterior a esta ha habido un crecimiento del 30% en el salario y en las dos anteriores hubo una subida del 44%. Las jugadoras reivindican una serie de condiciones que en las condiciones actuales de la competición no son acordes", destacó Alcaine, que añadió: "Hay jugadoras de 20.000, 30.000..., pero queremos hacer un convenio de mínimos".
"Hay muchos puntos de encuentro en lo que manifiestan las jugadoras. Todas las jugadoras desde la creación de la Asociación están cotizando y están dadas de altas. Sin convenio, el 75% de las jugadoras de los 13 clubes superan las condiciones que reivindican los sindicatos. Si las jugadoras deciden que la huelga es la vía para conseguir unas condiciones que ellas entienden como mínimos, están en su derecho, pero no todos los clubes pueden cumplirlos y no vamos a permitir que se lleve a situaciones de desaparición de varios clubes", indicó Alcaine.
También tomaron la palabra en la rueda de prensa Lola Romero, presidenta del Atlético Femenino, y el del Granadilla, Julio Luis Pérez. Éste último destacó que los clubes han no han recibido el dinero del patrocinio de Iberdrola. "Los que vengan a ayudar que vengan a hacerlo de verdad. El dinero de la temporada pasada de Iberdrola aún no lo hemos recibido los clubes", aseguró. Por su parte, la dirigente rojiblanca expuso: "Aportamos cifras y datos que fueron sistemáticamente puestos en duda por la otra parte, por lo que así es muy difícil negociar. No queremos poner luz verde al convenio y que en enero haya impagos a jugadoras".
La huelga, nuevo capítulo tras un año frenético en el fútbol femenino
Hasta aquí se llega tras más de un año de negociaciones entre sindicatos (AFE, Futbolistas ON y UGT) y patronal (ACFF). Ambas partes han protagonizado un sin fin de tiras y aflojas durante las más de 18 reuniones que se han producido, incluso ha habido discrepancias entre la parte sindical. Durante este tiempo, la mesa negociadora ha ido superando crisis de una y de otra índole. Desde una retroactividad que paralizó las negociaciones durante varias reuniones a la parcialidad, punto de desencuentro actual y línea roja de ambas partes para la llegada del convenio.
En cifras, los clubes ofrecen un salario mínimo de 16.000 euros brutos anuales a una parcialidad o jornada laboral del 50%, lo que quedaría finalmente en un salario mínimo de 8.000 euros. Esta cuantía es mayor en la propuesta de los sindicatos, que proponen una parcialidad del 75% sobre el mismo salario (16.000), lo que se traduciría en 12.000 euros. Ambas partes volvieron a fracasar este lunes en la llegada de un posible acuerdo. Tras otra reunión fallida, en este caso en celebrada en el SIMA, la parte sindical confirmó la huelga anunciada por la jugadoras para los días 16 y 17 de noviembre, que corresponden con la jornada 9 de Primera, justo tras el parón de selecciones. La huelga, que no afectará a competiciones internacionales o entrenamientos, comenzará en ese fin de semana y no se descarta que sea indefinida si sigue sin haber consenso.
Todo esto ha trascurrido acompañado de otros conflictos en el fútbol femenino como la llegada de la nueva Liga (Primera Iberdrola), impulsada por la Federación española y rechazada en un inicio por la mayoría de los clubes, que cedieron más tarde, o los derechos televisivos, con los clubes divididos en dos grupos: uno del que forman parte la gran mayoría y que tiene vendidos sus derechos a Mediapro y un pequeño grupo de equipos que tiene acuerdos de otro tipo y están respaldados por la RFEF.