Los 'nuevos Kubo' deslumbran al mundo en Brasil
Barrieron a Holanda, una de las grandes favoritas del Mundial. Brillaron Nishikawa (objetivo del Barça) y Wakatsuki.
La contundente victoria de Japón contra Holanda (3-0) es la gran sorpresa del Mundial Sub-17 de Brasil hasta el momento. Lo que lograron los japoneses no es asunto menor: Holanda es la actual bicampeona de Europa de la categoría y la gran favorita al título junto a Brasil y a Nigeria. El estadio Kléber Andrade de Vitoria estaba ayer repleto de ojeadores de los grandes clubes europeos (Real Madrid, Barcelona, Atlético, United, Juventus…) para terminar de perfilar los buenos informes que existían sobre muchos de los talentos holandeses (Hoever, Bogarde, Ünüvar…), pero lo que se encontraron es a una selección nipona que borró del terreno de juego a la Oranje.
Dos nombres destacaron sobre el resto: Jun Nishikawa y Yamato Wakatsuki. El primero es un mediapunta zurdo que pertenece al Cerezo Osaka y está en el radar del Barcelona (el club blaugrana tiene pensado intentar su fichaje cuando cumpla 18 años el próximo mes de febrero). Es un futbolista muy técnico al que también acompaña su físico (mide 1,81m.). A pesar de su juventud ya disputó también el pasado Mundial Sub-20 con Japón y es el gran líder dentro y fuera del campo de esta selección nipona. El segundo, Wakatsuki, se mostró al mundo con un doblete y un juego potente y eléctrico que desquició a una defensa holandesa que en la pasada Eurocopa Sub-17 se había mostrado muy solvente.
Los dos son las caras visibles de una selección que juega como un equipo perfectamente trabajado, donde cada movimiento está estudiado para dejar que en los metros finales sean los futbolistas de talento quienes desequilibren. Destacaron también los centrocampistas Shunsuke Mito y Hikaru Naruoka.
En resumen, esta selección nipona ha venido hasta Brasil para confirmar que la irrupción de Kubo en el panorama europeo es la primera de muchas. La superioridad mostrada ante Holanda en Brasil es fruto de muchos años de trabajo desde la base. Los ojeadores que se desplazaron hasta el Mundial para ‘pescar’ en las selecciones que habitualmente acumulan talento (Argentina, Brasil, Francia…) tienen otro nombre que apuntar en sus agendas: Japón.