Juan Carlos Moreno, hombre de confianza de Cárcel y aprendiz de Machín
El que fuera ayudante de Unzué dirigirá al equipo ante el Alcorcón y el resultado determinará si tiene opciones de mantenerse en el cargo o no.
Este miércoles arranca una nueva era en el Girona. Tras el adiós de Juan Carlos Unzué se espera que los resultados positivos no tarden en volver y de ahí que en Montilivi inician esta etapa con ilusión. Pero también hay dudas. Juan Carlos Moreno (44 años) dirigirá hoy, a partir de las 10:45 en La Vinya, su primera sesión de entrenamiento y el primer objetivo es devolver la confianza a la plantilla y preparar de la mejor manera el encuentro del domingo ante el Alcorcón. Moreno ocupa de forma interina el cargo de primer entrenador, pero no se descarta su continuidad si las victorias y el buen juego llegan y la entidad rojiblanca no acaba de encontrar el sustituto deseado para Unzué. Además, desde la secretaría técnica deslizan que el dinero que hay en caja les gustaría destinarlo a posibles fichajes en el mercado invernal y no a hacer frente a una ficha alta de un entrenador.
Los próximos días serán vitales en la búsqueda de un posible nuevo técnico, pero lo que más preocupa es que el equipo llegue de la mejor manera posible al duelo contra el Alcorcón. Será el estreno de Juan Carlos Moreno como primer entrenador en la élite. Hasta el pasado lunes era miembro del cuerpo técnico de Unzué y estará apoyado por otros hombres de confianza, y que también siguen, como Chicho Pèlach, Omar Harrak e Iñaki Codinach. Nunca antes había dirigido a un equipo en Segunda. Como futbolista lució las camisetas de Barcelona (estuvo bajo las órdenes de Cruyff y compartió vestuario con Pep Guardiola), Albacete, Lleida, Recreativo, Extremadura, Terrassa, Cartagena y Numancia. En el conjunto soriano fue donde más huella dejó y precisamente allí fue donde empezó a forjarse en los banquillos. Se considera un aprendiz de Pablo Machín porque durante dos años (de 2011 a 2013) fue su segundo en el Numancia y después, lideró al filial en Tercera tres cursos. Ya en 2016 aterrizó en Girona para integrarse en la secretaría técnica. Es un hombre de confianza de Quique Cárcel y es que en 2017 le ofreció la posibilidad de ser el entrenador del Peralada en Segunda B. Pero renunció por motivos personales y fue entonces cuando le suplió Chicho Pèlach. Moreno regresó a la secretaría técnica y ahora da un paso adelante en el banquillo del Girona y le llega esta oportunidad que tratará, sin duda, de alargar al máximo.