Remiro sigue el plan previsto por Alguacil y Llopis
Desde un principio la idea fue quitarle presión e ir dándole minutos poco a poco, gracias a la seguridad que les aporta Moyá.
Alex Remiro sigue un plan minuciosamente perfilado para ser el portero del futuro de la Real Sociedad. Un plan diseñado y previsto por el técnico del primer equipo, Imanol Alguacil, y el entrenador de portero, Luis Llopis; bajo la supervisión del director de fútbol, Roberto Olabe. Desde un principio, desde el momento que se confirmó su llegada al club txuri-urdin, la idea ha sido la de quitarle presión para ir dándole minutos poco a poco, apoyados en la seguridad que siempre transmite Miguel Ángel Moyá y que les permitía ganar tiempo hasta darle el sitio que creen que se va a acabar ganando en la Real, el de portero titular para muchos años.
Precisamente, por esa razón, en el club donostiarra se entendía que no había que tener prisa con Alex Remiro. Nadie dudaba de su potencial, pero a nadie se le escapaba en la Real que aterrizaba en Zubieta después de un año sin disputar ningún partido, siendo un portero todavía joven que curiosamente no había debutado todavía en Primera, y con la presión añadida de su origen y la forma de su llegada, después de negarse a renovar con el Athletic, que le apartó de las convocatorias consciente de que ello conllevaba su fichaje por la Real. La apuesta del meta de Cascante, y también la del club donostiarra, que apostaba por Remiro por delante de Gero Rulli, al que le daba salida tras una larga trayectoria en San Sebastián, llevaba a todo el entorno a considerar a Remiro como el titular indiscutible esta temporada en la portería del equipo de Alguacil.
Todo esto suponía una presión añadida sobre Remiro que desde el club han intentado rebajar en todo momento. No se le quiere quemar tan pronto, y para ello se apostó por dar la titularidad al experimentado Moyá para dar tiempo de maduración a Remiro. El club encomendó a Llopis la labor de prepararlo bien para cuando llegara su oportunidad. El entrenador de portero hernaniarra diseñó un plan específico para que el riojano recuperase el tiempo perdido tras un año de actividad. Al principio lo veía algo verde para asumir la responsabilidad de ser titular en la Real, así que le apretó mucho, poniéndole en todo momento el ejemplo de su compañero Moyá. Y Llopis poco a poco ha ido viendo una evolución y mejoras más que evidentes, hasta ver cómo recuperaba el notable nivel que dio en Segunda con el Huesca.
Tampoco hay que olvidar que la Real jugaba en San Mamés en la jornada 3, por lo que no se le podía poner en la tesitura complicada y agobiante de jugar contra el Athletic, lo que hubiera supuesto un riesgo en caso de no hacer una buena actuación. Era como ponerle una losa pesada, y tanto Llopis como Alguacil han buscado en todo momento que su entrada en el equipo fuera natural y no forzada, jugando cuando lo vieran preparado. Ante el Alavés ya pudo debutar en Primera, en parte obligado entonces porque Moyá estaba renqueante. Y contra el Betis le llegó su segunda oportunidad, al ser otro partido que creían que le podía ir bien y porque le ven ahora mucho mejor preparado para jugar en Primera, como quedó demostrado con su buena actuación. Ahora bien, que nadie se extrañe si contra el Celta Remiro vuelve a ser suplente y juega de nuevo Moyá. Formará parte del plan que tienen con el que consideran el portero del futuro de la Real. No hay prisa en darle la titularidad indiscutible. Paso a paso para no quemarlo. Su historia en San Sebastián no ha hecho más que comenzar.