Siete partidos en 22 días para estabilizar el vuelo
Sin tiempo, la misión de Machín es sacar al Espanyol del descenso en este tramo de tres semanas antes del tercer parón de la temporada.
Intenso y activo, sin perder un segundo. Pablo Machín entrena a contrarreloj para preparar al Espanyol para su duelo del domingo ante el Villarreal y los siguientes seis encuentros que deberán afrontar los blanquiazules en apenas 22 días. Es lo que tiene Europa, que no da tregua, sin apenas margen para entrenar más allá de las recuperaciones y de las sesiones antes de los partidos.
Tanto el técnico como los jugadores han ido dejando claro que LaLiga es lo prioritario porque ese es el reto que se han puesto desde la dirección deportiva y el cuerpo técnico en estos cinco encuentros del campeonato. Con cuatro puntos en la Europa League, los duelos ante el Ludogorets queda en un segundo plano, teniendo en cuenta de que al Espanyol le queda un encuentro en el RCDE Stadium (CSKA) y fuera ante el frágil Ferencvaros.
Villarreal, Levante, Athletic, Valencia y Atlético son los rivales inminentes en el campeonato, justo antes de que los pericos entren en el tramo final de la primera vuelta después del próximo parón, con encuentros como Betis, Barcelona y Real Madrid. Machín se ha marcado el objetivo de salir de la zona de descenso (el equipo acumula ahora solo cinco puntos) y de estabilizar el vuelo de una plantilla que hasta el momento se ha mostrado vulnerable e irregular en el campeonato.
Tres de estos encuentros serán lejos del RCDE Stadium, en los que el equipo ha sumado todos los puntos que acumula, mientras que dos de ellos serán en casa, donde ha perdido todo. Machín persigue la buena dinámica en tiempo récord.