Gritos racistas interrumpen dos veces el partido de Inglaterra

Inglaterra goleó este lunes a Bulgaria (0-5) en Sofia en un partido que fue marcado por los gritos racistas proferidos desde la grada y que llevó al árbitro croata Ivan Bebek a interrumpir el partido dos veces sólo en la primera parte.

Tras varias quejas de los jugadores y del banquillo inglés, el colegiado estuvo a punto de suspender el encuentro, que estuvo más de seis minutos parado, mientras las imágenes de la restransmisión mostraban a ultras encapuchados realizando el saludo fascita.

Los organizadores utilizaron el sistema de megafonía del estadio para avisar que si no hubiera un cambio de atitud de la grada el partido sería suspendido. La llamada de atención surgió afecto y el partido pudo ser reanudado y no volvió a ser interrumpido.

Barkley y Sterling marcaron un un doblete cada uno y Rashford, un golazo. Harry Kane cerró la importante victoria de Inglaterra que se recuperó del tropiezo en el partido anterior ante República Checa, la primera derrota de los leones en una clasificación para la Eurocopa desde 2009. Como Kosovo ganó a Montenegro, Inglaterra todavía tendrá que esperar para tener garantizada la plaza en la Euro 2020.