El Mallorca se aprovecha de un Espanyol deshecho
El conjunto blanquiazul mostró excesivas lagunas defensivas y los bermellones suman tres puntos que les devuelve la calma gracias a los goles de Budimir y Salva Sevilla.
El Espanyol ya sabe qué es perder esta temporada a domicilio. Y lo hizo por méritos propios. El Mallorca, que mereció el triunfo sin dudas, aprovechó la fragilidad defensiva perica para sumar tres puntos que le devuelven la alegría. Los nervios siguen instalados en un Espanyol que vuelve a dar pasos hacia atrás y David Gallego no puede confirmar la reacción. Budimir y Salva Sevilla se encargaron de sentenciar un duelo que vuelve a dejar muchas dudas en cuanto al futuro del entrenador perico.
El conjunto de Gallego llegaba subido en la buena ola tras su triunfo en Moscú, pero el Mallorca le devuelve a la nada. Tras un inicio canallesco, sin alicientes, el duelo parecía que se jugaba a lo que el Espanyol quería. Tenía la posesión, con una circulación parsimoniosa y en territorio estéril, y supo contener las acometidas del Mallorca, con un Lago Junior incisivo y peligroso. El partido parecía que se cocía a fuego lento, pero en un fogonazo llegó el 1-0. Fue el primero de los dos goles evitables. En el 37’, Pedrosa le dio un metro de más a un Sastre que le bastó con ganar la línea de fondo sin verse excesivamente presionado y poner el balón dentro del área. Ahí esperó Budimir, que se sacudió de encima a Lluís López con facilidad y, con un remate con la barriga, superó a Diego López. El delantero del Mallorca sigue marcando el ritmo en ataque para los bermellones porque ha firmado tres de los cuatro tantos del equipo en las últimas siete jornadas.
Tras el gol se vio mucho más cómodo al Mallorca y al Espanyol, desdibujado. La buena noticia para los pericos fue que no pasó nada más y tenía toda la segunda mitad para arreglar el desaguisado. Pero el descanso no surtió ningún efecto y a Marc Roca le seguía costando encontrar su sitio y Vargas y Wu Lei no aparecieron. Gallego metió a Naldo por el cansado David López (cumplió 150 duelos como perico) y, tras un rebote, casi empata, también la tuvo Campuzano, pero el equipo parecía hundido. Y el mazazo definitivo llegó con el 2-0. Otra vez, mal atrás. Tras un despeje corto de Lluís López y un grave error de Víctor Sánchez (cumplió 250 partidos de blanquiazul), Salva Sevilla hizo el gol de la sentencia con un disparo inapelable. El medio no marcaba desde 2015, precisamente con la camiseta del Espanyol, en Primera y aúpa a un Mallorca que respira. El Espanyol, por el contrario, se sigue ahogando y hundiendo en Liga.
Vicente Moreno
"Era una necesidad ganar y lo hemos conseguido, que sea justo o no justo ya es el cuento de nunca acabar, a veces también haces méritos y no lo consigues, estos son tres puntos que nos dan aire y cierta tranquilidad para trabajar estos quince días que vienen por delante, y este era uno de esos partidos en los que el que ganara deja tocado al otro".