UD SANSE 1 - REAL MADRID CASTILLA 1
El Castilla de Raúl salva los muebles en el 92’ ante el colista
Sin Rodrygo, el filial igualó en el 92’ gracias al juvenil Pablo ante un necesitadísimo Sanse que se adelantó con gol del exvalencianista Gavilán. Los blancos, cuarta salida sin lograr ganar.
Es de Perogrullo, pero es así. El Castilla sin Rodrygo es otra cosa. La jornada pasada fulminó (3-1) a uno de los aspirantes al ascenso, el Rayo Majadahonda, con un golazo del brasileño. Este fin de semana, en San Sebastián de los Reyes, sin el talento de la verdeamarelha, el Castilla se lió en la maraña del colista Sanse y tuvo que recurrir a un gran zurdazo de Pablo Rodríguez en el minuto 92 para no salir escaldado.
Finalmente el Madrid se guardó la carta Rodrygo y no la puso en la baraja castillista. En principio se le iba a reservar en los desplazamientos fuera de Madrid, pero también parece que va a jugar poco en la Comunidad. Sólo en Valdebebas. Pedro se quedó como principal referencia del filial arriba, pero la gran ocasión de la primera parte estuvo en la cabeza de un central, Manu Hernando. Su remate con muchísima intención en una acción a balón parado se encontró con una brillante respuesta, en forma de paradón, de Irureta en el minuto 38.
El Sanse maduró el partido, lo tuvo en pausa, hasta el momento en que le interesó cambiar el ritmo. Empezó como suelen hacer los equipos con mucha experiencia, a balón parado. Pipe Sáez, de falta directa, se topó con el palo de Altube después de que la tocase el portero castillista. Eso hizo que el Sanse, muy necesitado, oliese sangre. Y tiró de calidad. Gavilán, un futbolista de Primera (Valencia, Getafe, Levante…) apurando su carrera en Segunda B, se fue de Manu Hernando, 14 años menor en la partida de nacimiento, para sorprender a Altube, que pensó que el zurdo sansero le iba a cruzar la pelota y sin embargo la recibió por el palo corto. Error, esta vez, del tercer portero en el escalafón de Zidane.
A Raúl no le quedó otra que jugarse el todo por el todo. Quitó un central (Chust) para dar paso al Juvenil Pablo Rodríguez y apeló también a la experiencia del recuperado Feuillassier. Fue Pablo, en una gran prolongación de cabeza de Pedro y en el descuento, el que halló la fórmula para quebrar al Sanse con un buenísimo zurdazo.
El Castilla sigue sin ganar fuera, pero salvó un punto de esos que van siendo más dulces según avanzan las horas porque el Sanse le tenía contra las cuerdas. La semana que viene, con Rodrygo mediante si Zidane lo permite, será otra película.