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NUMANCIA

Francisco Rubio: “Tengo que aprender a ser aficionado”

Un año después de dar un paso al lado, el expresidente Francisco Rubio atiende a As para describir cómo ha sido su etapa al frente del Numancia y su actual día a día.

Francisco Rubio: “Tengo que aprender a ser aficionado”
Diario As

Es un hombre hecho a si mismo. Un año después de dar un paso al lado, Francisco Rubio atiende a As para describir cómo ha sido su etapa al frente del Numancia y su actual día a día. Reconoce que ahora puede disfrutar más del fútbol, de su empresa y sobre todo y más importante, de su familia.

¿Cómo ha sido este año para Francisco Rubio?
Francisco Rubio: Distinto en el ámbito futbolístico e intenso en el ámbito de trabajo, hemos cambiado el trabajo del fútbol por la intensidad del trabajo personal. Del día a día no me he aparto en cuanto a la información, sobre la gestión no tengo ninguna responsabilidad. El año pasado sufrimos un poquito pero este año las cosas pintan de otra forma. Disfruto del Numancia las veces que puedo verlo.

¿Se le hace raro no estar en el palco? ¿Le cuesta manifestar sus sentimientos?
Agradezco la pregunta y voy a ser honesto: tengo que aprender a ser aficionado. La ventaja que tiene no estar en un palco implica exteriorizar sentimientos que antes, aunque los tengas, los debía guardar. Con tantos años he notado y entiendo el sufrimiento del aficionado y también la alegría porque se puede exteriorizar. Estoy contento de ser un gran aficionado.

Durante bastantes Juntas de Accionistas usted avisó que cansa tirar del carro pero ese día llegó ¿ha llegado más tarde o más pronto de lo que pensaba?
Ha llegado en su momento. Ya lo dije, sucedió en el momento que había una oportunidad de continuar con el proyecto. También debo decir que dentro del entorno de la provincia tan pequeña como la nuestra, que haya responsabilidades tan importantes como tirar del carro del Numancia, es difícil. No digo que no haya personas pero encontrar un colectivo como el consejo de administración que yo he tenido, un consejo de amigos y con fidelidad absoluta, no era fácil. También provocado por sustos que te da la salud que hay que tenerlos en cuenta.

Si mira al pasado ¿cuál es el primer recuerdo con el que se encuentra?
Hay muchas personas que desgraciadamente ya no están con nosotros pero el primero es cuando llegué al salón de actos de Caja Duero, nuestra Caja, y vi una multitud de gente que parecía que perdía un hijo. Yo había estado en otros actos como presidente de la Asociación de Empresas de la Construcción de Soria y pese a las miles de batallas que ya había tenido pese a ser joven, ese acto era distinto. Eso nos impregnó a todos los que estábamos ahí, sobre todo a los que decidimos tirar del carro. Luego hay momentos deportivos y sentimentales pero eso fue de las veces que pensamos: ‘tenemos pocas cosas y una más que se pierde’, eso nos motivó. Yo era aficionado pero no entendedor porque me gustaba y sigue gustando la montaña y esquiar. Pero ahí entendimos que había que echar el resto. Agradecimiento inmenso a los consejos que me dio esa Junta Gestora, esa Junta de amigos.

¿Por qué veo en sus ojos el recuerdo a Domingo Heras?
A Domingo lo conocí mucho antes de esta aventura, cuando él era el Secretario del Ayuntamiento de Navaleno. Aparte del cariño y amistad personal siempre ha sido de esas personas, y no es fácil decirlo de las que no están, pero la sociedad soriana no le ha reconocido sus méritos. En lo personal era íntegro, de palabra y trabajador. Además inteligente y reflexivo. No se cabreaba nunca pero meditaba las cosas y te aconsejaba. Para todos nosotros nos insufló a meditar más. Todos los compañeros del Consejo lo echamos en falta y se le debe el reconocimiento en lo social y particular del club.

¿Cómo fue la conversión del Numancia en sociedad anónima deportiva?
Cumplíamos una Ley pero había que buscar el dinero porque aquí somos los que somos y el tejido industrial es el que es. Nos asesoraron unos amigos que convirtieron la Real Sociedad en SAD y nos guiamos de sus consejos. El otro día encontré un abono del aquel año, ahora recopilo y ordeno información, hubo que hacer trabajo logístico, actualizar los socios, no fue sencillo.

La Copa del Rey del 96, los ascensos, temporadas en Primera División ¿qué le ha calado de todo ello?
Son varios pero siempre hablo del partido de Huelva (ascenso de Segunda B a Segunda). El partido, la emoción y lo que nos podía pasar o no a futuro fue aquel encuentro. Me di cuenta que había varios factores: o estás en la LFP o continuar más años en Segunda B nos hubiera cansado y posiblemente desaparecería, no sé en cuánto tiempo pero sucedería. Recuerdo que antes del partido en Huelva no pegué ojo en toda la noche. Me quedé en un hotel en Punta Umbría, y sentía una responsabilidad como si me fuera la vida. La Copa fue un estímulo total a algo que no había sucedido nunca en Soria. Gente que veía el balón sólo en televisión presumía de numantinismo. Luego las Administraciones se acordaron un poco tarde por las batallas que tuvimos con las gradas, con el Alcalde….pero parabas a pensar y veías que se había puesto a Soria en el mapa. Sacamos un sentimiento guardado. Somos una tierra olvidada. El éxodo masivo, las ayudas de la Caja, eso no lo he visto nunca. Ni siquiera para protestar en el 89 cuando nos quitaron el tren a Madrid. No sé los que estábamos ahí. No he sido muy activo de estar en todas pero, en las que hay que estar he estado, como la última en Madrid de Soria Ya. Cuando merece la pena hay que ir.

En el 96, y doy fe de ello porque yo estaba, ustedes pusieron autobuses gratis para las categorías inferiores y ver el partido de vuelta de la Copa en Barcelona ¿por qué surgió esa idea?
Sin entender de fútbol he procurado copiar lo bueno de otros lugares. Movimientos estructurales en otras provincias que funcionan. Queríamos generar un poso de sentimiento con el equipo de tu ciudad. He creído y sigo creyendo que un equipo como el Numancia está condenado a tener cantera propia. Con chicos de Tudela o Tarazona, que también los hay, pero que tengan sentimiento del Numancia. Creo que eso deberá seguir siendo los pilares de esta casa, si no se pierde el sentimiento. Si sólo utilizamos la visión del talón y traer a doscientos y de aquí y de allá, si perdemos eso, perdemos el fútbol. Es cierto que el aficionado quiere una barato y que meta muchos goles pero es complementario con tener a 400 chavales que quieran jugar en el primer equipo.

Si me permite una teoría personal, el problema del Numancia es generacional. Ahora hay chavales que sólo han visto al Numancia en la LFP…y no saben lo que había unos años atrás…
La comparto. Apuntarse a lo bueno es fácil. Creo, y en mi época lo hicimos, es pedagogía en la propia casa. En la Ciudad Deportiva se fomentaba que los críos sepan de dónde venimos. El trabajo de Toño, mi hermano o César es incuestionable. Son grandes profesionales y se evalúa y puntúa enraizar el sentimiento del Numancia, aunque el chaval no haya nacido en Soria. Todo lo contrario es bueno y positivo la mezcla.

En su etapa al frente del Numancia coincidió en palco y presidencia con otro soriano como Jesús Gil ¿Cómo fue aquella relación y el famoso fichaje de Txomin Nagore?
De la familia Gil sólo puedo hablar maravillas, en lo personal, Jesús, era jovial, entrañable y cariñoso. Presumía de soriano y burgense. Sigo teniendo relación con Miguel Ángel y Clemente. Es cierto que vivimos un momento convulso en la familia del Atlético de Madrid. El fichaje de Txomin…nosotros ya pagamos caro por el jugador al Athletic de Bilbao. Tuvimos mucho recorrido en el tiempo…pero se cumplió a rajatabla lo pactado. Luego incluso hemos tenido algún jugador del Aleti. La relación sigue siendo excelente. Por mis empresas tengo carnet del Aleti siendo del Athletic Club por diferentes compromisos.

¿Qué sintió cuando el Numancia jugó en San Mamés y Octavio hizo la ofrenda de flores a Pichichi?
Estaba de presidente José María Arrate. Ya lo conocía de otras historias, me miró y me dijo que me veía sentimental. No es por presumir de duro o blando, cada uno expresa sus sentimientos como le da la gana, pero le reconocí que sí. Tuve orgullo por llegar a San Mamés y ver qué importante era el Numancia. Eso queda para toda la vida. Quizás la gente piensa que es efímero o para aficionados de otros equipos, o para jugadores, pero muchos me han reconocido que no tiene nada que ver el San Mamés pero ahí se respira algo distinto. Es cierto que el Bernabéu acongoja, o el Camp Nou asombra…pero aquel campo y el de ahora tienen algo. Además que cuando han venido aficionados como la de Bilbao o San Sebastián, sin desmerecer a ninguna, se integran, disfrutan, gastan el dinero, animan, son cordiales. Tienen una cultura semejante a la nuestra de montaña, setas…trabaje allí en años difíciles, muy difíciles como el 79 u 80, y de aquello sólo tengo amigos.

No sé si cree en el destino pero coinciden varios aniversarios. Un año de la salida suya de la presidencia. 40 años de la fundación del Soria CF y 75 años del CD Numancia…
Es positivo que lo celebremos. Sobre todo por haber llegado a los 75 años y encima en la LFP que no es poco. El aniversario del Soria CF…yo no lo viví pero mi hermano Eduardo jugó en aquel equipo. Yo bastante tenía hace 40 años para trabajar y sacar una familia adelante porque era el mayor. Sé que lo llevaban adelante Felipe y Miguel Ángel Ayuso. Es cierto que hicimos un homenaje al Soria con la segunda equipación, esa camiseta blanca con la franja diagonal morada. Es mérito de responsabilidad del consejo. Además era el segundo club de la capital y está identificado con muchos valores del Numancia. Nunca habría sido una escisión del Numancia sino complementario. Y que la siga teniendo pero lo que se haga de ahora en adelante no depende de mí.