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ATLÉTICO - REAL MADRID

Un derbi picante: de Nueva Jersey al Wanda Metropolitano

João Félix y Hazard, centro de un duelo marcado por el 7-3 de EEUU. Simeone medita un cuatrivote y Zidane, calcar el plan del Sánchez Pizjuán.

El Wanda Metropolitano se llenará hoy para ver el derbi.
El Wanda Metropolitano se llenará hoy para ver el derbi.AFP
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Tiene este derbi, el 274 de la era cristiana, un arranque demoscópico. Las horas previas las devoró el reciente debate sobre a quién le cabe la condición equipo del pueblo, como si el hecho diera una ventaja moral o aritmética sobre el adversario. Se da por imposible que a la hora del partido pueda probarse científicamente si la tesis de Simeone es cierta o no. "Aquí se trabaja mucho", dijo Zidane para justificar no se sabe qué. Hoy, a las nueve de la noche, en el Wanda, se hablará de otra cosa, de dos equipos separados por un punto, tan cerca como en los mejores momentos de su larga historia y con dos plantillas cuyo valor global supera los 2.000 millones. Un partidazo.

El contexto lo pone el enfrentamiento de julio en Nueva Jersey, aquel 7-3 que agrandó el ánimo del Atlético y encogió la esperanza del Madrid. Un resultado borrado como referencia a ambos lados de la ciudad. De aquel once repetirán probablemente ocho en el Atlético y sólo cinco en el Madrid. Y es que aquel día Zidane no tenía aún a Casemiro y no le dio la titularidad a Benzema, a día de hoy las muletas del equipo. Aquel encuentro dejó unas estadísticas desconcertantes: el Madrid tiró más, tuvo más posesión, más acierto en el pase, sacó más córneres e incluso hizo más faltas y vio más tarjetas, presuntos síntomas de intensidad. Detrás de los números quedaron que Diego Costa fue indetectable y que João Félix va para figura mundial.

A favor del Atlético estará el Wanda Metropolitano, pese a que aún no le ha ganado allí al vecino, y a favor del Madrid, el factor fatiga. Zidane metió ocho suplentes frente a Osasuna que, posiblemente, hoy volverán al banquillo. Las piezas cruciales del equipo llegan frescas. Simeone, por el contrario, sólo cambiará tres: entran Trippier y Giménez por Arias y Hermoso y Vitolo será relevado por Lemar o Llorente. Si juega el canterano del Madrid, montará un cuatrivote, inédito esta temporada pero utilizado ya en el primer derbi en el Wanda (Saúl, Gabi, Thomas, Koke), en 2017, y que acabó empate a cero. Arriba son seguros João Félix y Diego Costa tras la sanción a Morata, confirmada ayer por el Comité de Competición. Una baja notable en los rojiblancos. Desde su llegada, jugó en todos los partidos en que estuvo disponible menos uno.

Un Madrid impermeable

El Madrid ha recuperado efectivos (Marcelo, Isco y Modric), pero tan a última hora que difícilmente arriesgará de salida Zidane. La previsión apunta a que repetirá el once de Sevilla con el único cambio del lesionado Mendy por Nacho. Un equipo sospechosamente parecido al que fue arrasado en París pero con una predisposición defensiva casi desconocida. El grupo que en pretemporada salió a 2,5 goles encajados por partido lleva ahora dos sin recibir un solo disparo a puerta. Con los mismos jugadores, el mismo entrenador, la misma camiseta y hasta los mismos peinados. La autopsia del Parque de los Príncipes dejó clara la causa de la muerte: falta de actitud.

El Madrid, pues, se ha puesto a la altura del punto fuerte del Atlético, al que una defensa extrema le ha conducido a la gloria. Por el mismo camino va este año, porque en cuatro de sus seis partidos ligueros dejó su portería a cero, incluidos los dos últimos. Eso trajo Simeone y devolvió la igualdad al derbi. Zidane jugó en la Edad Media del Atlético y no perdió ninguno de los ocho partidos que disputó de corto ante los rojiblancos. Como técnico le ha caído el Renacimiento y la cosa ha empeorado: dos victorias, tres empates y dos derrotas. También Simeone anda en empate técnico con el Madrid (nueve victorias, diez empates y diez derrotas), un giro histórico teniendo en cuenta de dónde venía el Atlético. Y le ha ido mejor en España que en Europa, donde se ha visto en cinco duelos con el Madrid y sólo ha ganado uno. En cambio, le quitó una final de Copa y una Supercopa nacional.

También será el derbi de João Félix y Hazard, los jugadores que refrescan la imagen de dos vecinos que han fichado este verano más suplentes que titulares. De los quince recién llegados entre ambas plantillas sólo están en las previsiones de hoy los dos citados, Trippier, Lodi y quizá Llorente. Con ellos y los que ya estaban, en cualquier caso, queda un derbi de gran lujo.