Rapione, una The Best más allá del césped
Megan Rapinoe fue nombrada The Best en los premios FIFA. La jugadora estadounidense fue la gran triunfadora del Mundial, pero su repercusión fue más allá del césped
Megan Rapinoe fue nombrada por FIFA la mejor jugadora del planeta esta temporada. Se llevó el premio The Best por delante de Lucy Bronze y Alex Morgan. Su excelente Mundial, donde acaparó los premios individuales (Balón de Oro y Bota de Oro), y su personalidad conquistaron al mundo en Francia. Su repercusión llegó incluso a un enfrentamiento dialectico con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Siempre ha defendido la igualdad y los derechos de mujeres y el colectivo LGTB. Rapinoe es una The Best que traspasa el céped.
Megan Rapinoe lleva toda una vida forjándose un nombre en el fútbol femenino. Sólo hay que mirar su palmarés con Estados Unidos para comprobar que lo consiguió. Dos Mundiales, un oro en los Juegos Olímpicos y una plata y toda una carrera al más alto nivel en su país e incluso en Europa, como no podía ser de otra manera, en el todopoderoso Olympique de Lyon. Pero el gran público la conoció en Francia. Rapinoe no dudó en usar ese gran altavoz, el Mundial y en un momento en pleno apogeo, para reivindicar derechos. Se enfrentó a todos. Primero a Trump y a la Casa Blanca, afirmando que no iría a la invitación del presidente de su país. Sus políticas que debilitan los derechos de mujeres, homosexuales y emigrantes fue el detenante. Rapinoe, como protesta, no canta el himno de su país antes de los partidos, lo que es un símbolo de discorformidad y lo que llegó a un cruce de declaraciones entre la delantera y Trump, que terminó con este diciendo que primero tenía que ganar para que le invitaran. Rapinoe y sus compañeras ya tienen el título.
Su personalidad y caracter le han convertido en un icono más allá del césped. Porque dice las cosas como las siente a quien sea. No terminó con Trump. Rapinoe también hizo público lo que muchos piensan: la falta de respeto de FIFA al dejar que se jugaran dos finales más el día que se disputaba la final del Mundial. Dijo que no sentía el mismo trato por parte del organismo para hombres y mujeres .Otra verdad que dolío, aunque no llevó a tanta polémica.
Sue Bird, que juega en los Seattle Storm de la WNBA, es también fiel defensora del movimiento LGTB y su pareja. Ambas luchan por los derechos de las mujeres y los homosexuales y, públicamente, han aparecido en muchos medios para reclamarlos. La importancia de Rapinoe va más allá del campo, donde ha demostrado ser una de las mejores del mundo. La jugadora del Reign (mismo equipo que la española Celia Jiménez) ya es un icono y un ídolo, no sólo por su juego, sino también por decir lo que tanta gente piensa y hacerlo en el evento femenino más grande del mundo...