"No por ganar un partido vamos a cambiar nuestro estilo"

Llegó la victoria...
Por fin. Sobre todo para los que estábamos la temporada pasada, que ya llevábamos 15 partidos sin ganar, era muy importante hacerlo. El vestuario, y la afición, que estuvo increíble, lo necesitábamos.

¿Cual fue la clave?
Hicimos un partido muy serio, tuvimos siempre el control del juego, sin conceder ocasiones, supimos hacer daño a sus espaldas, porque ellos marcaban al hombre y dejaban espacios. Además, nos adelantamos pronto y esos nos vino bien.

Cada vez parece más claro que ustedes manejan varios registros, no solo el de la posesión, sobre todo con Nuha...
Si eres previsible te tapan muy fácil. Supimos aprovechar las virtudes de Nuha, que les ganaba los duelos y a partir de ahí jugábamos en su campo. Con los dos estilos me encuentro cómodo.

¿Puede que cambien ahora el sistema base?
No vamos a renunciar a nuestro estilo. No hay que arriesgar en exceso, pero no, por haber ganado, vamos a jugar todo directo y a las segundas jugadas. Podemos usar los dos perfiles perfectamente.

¿Llegaron a tener dudas al ver que se resistía el triunfo?
En ningún momento he visto a nadie en el vestuario que dudara de que el objetivo se va a cumplir.

¿Fue su mejor partido desde que regresó al Racing?
Puede ser. Todo el equipo estuvo de chapeau, muy honrado, y eso se notó en el resultado.

Se coreó ¡Mario, Mario!...
Sí, lo oí. ¡Quien me iba a decir a mí cuando iba de pequeño a El Sardinero que un día el público gritaría mi nombre! Estoy inmensamente agradecido y espero hacer méritos para que vuelva a suceder.

¿Le da mucha importancia a dejar la portería a cero?
Sí. Lo hablamos incluso en el descanso, no queríamos que el marcador nos despistara, queríamos acabar sin encajar.

¿Siente que el triunfo les ha quitado un peso de encima?
Sí, quieras que no, nos tomamos el partido como una final, aunque no lo era, y el ganarlo nos puede suponer ir a los próximos partidos más tranquilos, empezando por el del Sporting.

El domingo, en Gijón, no estarán solos...
Aunque sea en Pekín, nuestra afición siempre está ahí. Mira el martes, a las 7, la cantidad de gente que fue al estadio a animarnos. Eso lo hay en muy pocos sitios.